Óscar Rodríguez/Milenio
OAXACA, Oaxaca.- Efraín Cruz Bruno, asesinado a tiros cuando conducía la camioneta de su esposa, la candidata a diputada en Oaxaca por PRI y PVEM, Rosalía Palma, estuvo preso por haber ordenado la muerte de un candidato local y se le investigó en algún momento por presuntos nexos con bandas del crimen organizado.

De acuerdo con expedientes e investigaciones de la procuraduría estatal, el empresario era compadre del exgobernador Ulises Ruiz y recibió 35 disparos de arma de alto poder cuando conducía la camioneta de su esposa la semana pasada.

Según una línea de investigación, el asesinato de Cruz Bruno obedece a una venganza personal por la disputa del poder político y económico en San Andrés Cabecera Nueva, así como por conflictos de intereses con empresarios madereros.

Pedro Silva Salazar, exdiputado y exlíder estatal del PRD, acusó a la víctima de ordenar a un grupo de sicarios el asesinato del entonces candidato a diputado local Fidel Bautista Mejía. El ataque ocurrió cuando departía con el aspirante en un bar local.

Cruz Bruno era un empresario maderero originario de San Andrés Cabecera Nueva, donde es señalado por sus habitantes como “cacique priista”.

Según los pobladores, el ascenso económico y político del priista comenzó en la década de los 80, cuando llegó al Comisariado de Bienes Comunales.

Entonces tomó el control de un aserradero junto con un grupo de seguidores y sus hermanos Miguel, Yair y Rigoberto.

En tanto, la procuraduría de Oaxaca precisó que el atentado contra Rosalía Palma y el asesinato del presidente del consejo estatal del PRD, Nicolás Estrada Merino, no tienen relación con el proceso electoral del domingo, sino que son venganzas personales.

El procurador Manuel de Jesús López dijo que en ambas investigaciones coadyuva la PGR por el uso de armas de fuego de alto poder y por la forma en que se perpetraron las agresiones.