Viajó en calzones y la toquetearon

Una de las participantes del flashmob “Viaje en el Metro sin pantalones”, relata cómo un usuario le agarró el trasero al salir de la estación Revolución.

|
Cerca de 2 mil 500 personas se despojaron de pantalones, faldas y pants dentro de los vagones del Metro. (Notimex)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Alejandro Madrigal/Milenio
MÉXICO, D.F.- El peor día en la vida de Tania en el Sistema de Transporte Colectivo Metro fue ayer, cuando decidió, con un grupo de amigos, quitarse la falda y viajar en ropa interior dentro de los vagones del transporte público más usado por los capitalinos. No obstante, un usuario la toqueteó.

La razón por la que esta empleada de 27 años decidió viajar en paños menores fue sumarse al flashmob, que se realizó de manera simultánea en 50 países, y que en México se llamó “Viaje en el Metro sin pantalones”.

Pero más allá de la misión de este movimiento, que es obsequiar un día de felicidad para los que a diario se transportan por este medio y de fomentar el trabajo en equipo entre personas desconocidas, la petición para Tania se transformó en solicitar respeto y seguridad.

Tania viajó feliz durante las 19 estaciones que comprendía el recorrido desde Chapultepec, de la Línea 1, hasta Revolución, Línea 2, con sus transbordos en Tacubaya, Mixcoac e Hidalgo.

Fue justamente al bajar de la última estación, Revolución, cuando sintió que un joven, que además de observarla durante todo el trayecto, se atrevió a tocarla, pero no contaba con que Tania lo tomaría de la playera y gritaría a sus amigos que le habían faltado al respeto. Inmediatamente llamaron a la policía y se llevaron al hombre a un rincón.

“Veníamos todos en el vagón, en Hidalgo, mucha gente y nunca falta el que se quiere pasar de listo, solo lo tomé de la mano y le dije a los muchachos que nos estaban faltando al respeto, pero al bajar me alcanzó a tocar las pompas, pero como yo le vi toda la intención, lo tomé y cuando bajó le hablé a la policía.

“Entonces ellos me dijeron que si quería proceder y les dije que no, que solo quería irme porque vengo a disfrutar con toda la gente”, mencionó Tania en los andenes del Metro.

Sin embargo, la amarga experiencia que vivió Tania, no la padeció Valeria, una niña de 10 años que también se quitó su pants en compañía de sus cuatro tíos y un primo para disfrutar del flashmob.

“Vine a divertirme quitándome los pantalones. Me enteré por mi tía que siempre viene, y por supuesto que no me dio pena porque solo es diversión”, indicó Valeria, estudiante de quinto año de primaria.

Tania y Valeria fueron parte de las cerca de 2 mil 500 personas se despojaron de pantalones, faldas y pants dentro de los vagones del Metro para intentar romper el récord de mayor cantidad de personas en ropa interior en un transporte subterráneo.

De acuerdo con Dan Becharano, uno de los agentes convocantes, la movilización “es una medida de presión para exigir seguridad, porque no podemos estar esperanzados, queremos que nos cumplan”, dijo.

Desde las nueve de la mañana los participantes comenzaron a organizarse ania participó en el flashmob “Viaje en el Metro sin pantalones” y relata que un usuario le agarró el trasero al salir de la estación Revoluciónen las escalinatas de la Estela de luz, donde alertaron a los participantes de no revelar que forman parte de la misión, la cual fue convocada a través de las redes sociales y que tan solo en Facebook se suscribieron más de 12 mil personas, de acuerdo con los organizadores.

“Mi argumento fue que dejé mis pantalones en la tintorería o simplemente se me olvidó ponermelos”, comentó Bryan, uno de los agentes de la misión.

Durante el tercer año consecutivo, los participantes terminaron cinco horas después en el Monumento a la Revolución con un baño en la fuente pública.

Lo más leído

skeleton





skeleton