Víctima de un golpeador... y de la justicia
Lucero fue agredida por un joven con quien se negó a tener relaciones sexuales, pero la juez la acusó de inmoral.
Agencias
GUANAJUATO, Gto.- El pasado 12 de septiembre, la joven guanajuatense María de la Luz Salcedo, de 18 años y mejor conocida como 'Lucero', fue brutalmente golpeada por un joven con el cual se negó a tener relaciones sexuales.
La madrugada de aquel día, Lucero salió del bar donde trabajaba como mesera cuando un amigo y el que más tarde sería su agresor, Miguel Ángel Jasso, la invitaron a tomar un trago.
La joven se negó pues estaba cansada y a las nueve de la mañana iniciaba turno en una tienda de bisutería.
Después de llevar al amigo en común a su hogar, Jasso llevaría a Lucero a su casa, o al menos eso fue lo que le dijo. En realidad su intención era tener relaciones sexuales, a lo que ella expresó su negativa.
"Trate de abrir la puerta del auto pero él aceleraba, con la mano izquierda iba manejando y con la mano derecha me venía sujetando por el cuello", relató Lucero.
Llegaron hasta el poblado conocido como Ojo de Agua, en la Sierra de Santa Rosa, muy cerca de Dolores Hidalgo.
“Estaba fuera de sí, tenía demasiada fuerza, cuando al lado de la carretera encontró un acotamiento, se detuvo y me bajó del coche. Trate de defenderme pero su cuerpo estaba encima de mí, me daba puñetazos en la cara, intentó asfixiarme”, evocó Lucero.
Tras suplicarle que dejara de golpearla, Lucero recordó cómo salvó su vida.
“Le empecé a gritar que me viera a los ojos: ¡ve a tu mamá, ve a tu hermana! Algo lo desconcertó, se detuvo un poco y yo pude meterle las uñas a los ojos”, expresó.
Al otro lado de la carretera había una zanja donde pudo esconderse. El agresor nervioso se subió al coche y se estrelló metros después.
“Horas después Miguel Ángel Jasso era ingresado al mismo hospital a dos camillas de distancia de Lucero. Había chocado. No había seguridad, no había guardias, no había custodios. Mi hija estaba a unos pasos de la persona que unas horas antes había intentado matarla”, se lee en la petición que Fermín Salcedo, padre de la joven, lanzó a través de Change.org con el nombre “Justicia para Lucero”.
Ante esta situación, Lucero interpuso una queja contra la Procuraduría General de Justicia de Guanajuato, la Policía Federal y contra el Hospital General de la ciudad.
Eco nacional
El caso fue ampliamente difundido en redes sociales, donde alcanzó eco nacional. Incluso existe en Facebook una página denominada 'Justicia para Lucero'; pero si no se hubiera hecho público el caso, quizá el proceso no hubiera sido tan rápido.
“Mi peritaje psicológico estaba programado para el 25 de septiembre' porque no tenían tiempo', gracias a la campaña mi prueba fue el día 18”, denunció Lucero.
De acuerdo con el Código Penal vigente en el estado de Guanajuato, tan solo por el delito de lesiones, Miguel Ángel Jasso debería recibir sentencia de entre tres y seis años de prisión y el pago de una multa de treinta a sesenta días.
A esto habría que sumar penas por ataque, intento de violación y tentativa de homicidio. Con el concurso de delitos podría alcanzar hasta cuarenta años de cárcel.
A pesar de que su agresor fue plenamente identificado ante la Agencia del Ministerio Público, no fue detenido inmediatamente. La familia Salcedo asegura que de no haber iniciado una campaña mediática por Internet, no hubieran logrado llevar al presunto culpable ante el juez.
Del lado del victimario
Después de 18 días de la agresión se concluyó la averiguación previa, y para el lunes 30 de septiembre, se inició el proceso en contra de Miguel Ángel Jasso.
La Agencia del Ministerio Público Especializada en Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar que depende de la Procuraduría General del Estado de Guanajuato informó que la audiencia se desarrolló bajo el nuevo sistema penal acusatorio y oral, vigente en Guanajuato capital, lo que fue celebrado por Fermín Salcedo.
“La cultura gubernamental de Guanajuato casi la podemos calificar de misógina. Aquí no se aprobó la ley para protección a mujeres, por no considerarse necesario. Espero que la modalidad de juicios orales agilice la aplicación de la justicia”, sostuvo Salcedo.
Lucero denunció que las autoridades encargadas de procurar justicia se pusieron de lado de su agresor.
El 30 de septiembre, la juez Paulina Medina Manzano determinó que los delitos a perseguir en este caso son lesiones y abuso erótico sexual, considerados menores, por lo que fijó que Jasso deberá recibir terapia por problemas de alcoholismo y drogadicción, además de pagar una fianza de 15 mil 630 pesos para que enfrente en libertad el proceso en su contra.
Además, la juez ventiló detalles íntimos de la víctima y la tachó de inmoral cuando ésta reveló que perdió la virginidad a los 17 años.
Con esto, desechó la petición del fiscal para juzgar a Jasso Manríquez por intento de violación y tentativa de homicidio, a pesar de las 19 lesiones en el cuerpo y el estrés postraumático que presentó la víctima.
Lucero expresó su decepción e inconformidad por los resultados de esta audiencia, aunque eso no la desanima en la búsqueda de justicia.
“Él (Miguel Ángel Jasso) admitió haberme golpeado, además se omitieron pruebas relevantes como el intento de estrangulamiento. El abogado de la defensa me tachó de inmoral por iniciar mi vida sexual a los 17 años, pero claro que se podía esperar, defendía lo indefendible”, narró Lucero.
La joven señaló que trabajará junto con su abogado en reunir nuevas evidencias para la siguiente audiencia, fijada para el 30 de noviembre.
Doble víctima
Salcedo Palacios señaló que su caso muestra las deficiencias que padecen las mujeres víctimas de violencia en su entidad.
En una carta, Lucero manifiesta que se convirtió en una doble víctima, de Miguel Ángel Jasso por golpearla, y del sistema judicial de Guanajuato por hacer de la audiencia para imputar cargos a su agresor un montaje, en el que se omitieron pruebas de los actos violentos y se priorizaron detalles de su vida privada.
A través de la página de Facebook ‘Justicia para Lucero’, la joven guanajuatense publicó la carta, dirigida a la jueza Paulina Iraís Medina y al abogado de su agresor, Héctor Corona Vieyra, quien durante la audiencia del pasado 30 de septiembre la calificó de inmoral por haber perdido la virginidad a los 17 años.
Lucero escribió de manera sarcástica que ella terminó siendo culpable de los delitos de lesiones y abuso erótico sexual, por “provocadora e inmoral”, pero advirtió que no se detendrá en la búsqueda de la justicia.
Aquí la carta de Lucero:
"Respetables licenciados, he tratado de formular las palabras correctas para expresarles a ustedes mi sentir por su desempeño el día lunes 30 de septiembre del presente, en la audiencia de vinculación por la denuncia hecha por su servidora, sin embargo no las encuentro, no puedo decir exactamente la impotencia, coraje, y demás que siento, por lo que les dedicaré sólo unas reflexiones personales.
En esta audiencia, el objetivo principal era presentar los delitos por los que se condena a la persona de la cual recibí una agresión el pasado jueves 12 de septiembre, sin embargo se volvió más que eso, se volvió un circo, un montaje destinado a demostrar una, y cada una de las fallas con las que lidian miles de personas al acudir a denunciar un acto como del que yo misma fui víctima.
Fue una audiencia muy curiosa, ya que la víctima terminó siendo culpable y el inculpado una víctima más, de una mujer desidiosa, sisañosa, provocadora e inmoral como la que soy yo.
Una audiencia en la cual, hasta me dieron ganas de pararme y pedir perdón, a usted su señoría, por hacerle perder el tiempo, a usted licenciado, por haber tenido que leer todas las inmoralidades que he cometido, y a Miguel, sobre todo a él, por hacerlo pasar por semejante situación, por haberlo provocado, por haberle causado enojo al decirle que no, por haberlo desprestigiado, ya que está arrepentido, él se disculpó por haberme casi matado, por haberme hecho pasar por, sino el peor, uno de los peores días de mi vida, y yo? yo haciendo que sufra. Perdón; a ustedes mis más sinceras disculpas.
En esta audiencia se ventilaron datos de mi vida privada, datos irrelevantes para el caso, y aún más, siendo manifestados de una manera denigrante, haciéndome entender que yo fui merecedora del acto cometido contra mi persona, que me lo busqué, por inmoral, por tener una vida sexual, por pensar que soy libre de decidir con quién estoy y con quién no.
Pero aún con todo esto les agradezco. Les agradezco que no lo hayan metido a la cárcel, que me hayan acusado de todo lo que se me acusó, que hayan hecho uso de trucos sucios y bajos, que hayan omitido hechos bastante relevantes, que no hayan impuesto los delitos que debieron ser, que hayan hecho esto y todas las demás fallas que tuvieron ese día, porque la gente se dio cuenta, porque la gente no es idiota y se dio cuenta de lo que ocurrió, de que ahora no sólo soy víctima de esta persona, soy víctima de ustedes, del sistema, y que aún así no me detendré, no voy a parar, porque esto sólo es la punta del iceberg, sólo es el comienzo.
Por su atención gracias, María de la Luz Salcedo Palacios".
(Con información de Milenio)