MÉRIDA, Yuc.- La Reforma Energética abre una nueva ventana a los desarrolladores de la Península de Yucatán, ya que ante los cambios legales realizados en el tema de la producción de electricidad, los constructores podrán tener plantas de energía limpia en sus desarrollos habitacionales y cobrar por el servicio, señaló el presidente de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC), Carlos Ramírez Aguilar.

“De acuerdo con la ley, los desarrolladores podrán producir su propia energía, operar la red de baja tensión, poner medidores y cobrar por esa energía”, detalló.

Matías Bermúdez Guerra, gerente comercial de Suministro Básico Peninsular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), explicó a socios de la AMIC las oportunidades para ese sector con la reforma energética.

Durante la charla, el funcionario de la CFE adelantó que para 2018 y 2019 se abrirán ocho plantas de energía limpia, las cuales ya son construidas en Progreso, Chabacal (I y II), San Ignacio, Cuncunul, Kumbul, Ticul y Tizimín.

Bermúdez Guerra precisó que con la puesta de estas ocho plantas en los próximos dos años, los consumidores del sector industrial se verán beneficiados al bajar los costos por la energía, al diversificarse la oferta en la producción. Detalló que las plantas fueron subastadas el año pasado y cuentan con capital mexicano, chino, español, hindú y peruano.

Puntualizó que durante 2016, la CFE atendió a 801 mil 613 clientes tan sólo en Yucatán, lo cual le significó un ingreso de la paraestatal superior a los seis mil millones de pesos.

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