Patricia Itzá/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yuc.- Con la muerte de cuatro albañiles por el derrumbe parcial de una obra en construcción en la calle 60 se rebasó el número de muertes de 2016 en este sector en Yucatán, señaló el delegado del Trabajo y Previsión Social, Ricardo Béjar Herrera.

El funcionario detalló que el año pasado se reportaron nueve fallecimientos por percance laboral y este año ya suman 11.

De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), hasta el primer semestre de 2017 se contabilizaron seis muertes; en septiembre ocurrió el deceso de un albañil en el complejo Vía Montejo, que aún está en construcción, y el pasado lunes perdieron la vida cuatro alarifes.

Sobre el percance del pasado lunes, el delegado dijo que la primera parte de las investigaciones durarán unos 15 días en los que se recabarán informes de la Fiscalía General del Estado y la Coordinación de Protección Civil, además de las pesquisas que realice la STPS.

El derrumbe

Ante los medios de comunicación, Béjar Herrera explicó que en el percance resultaron heridos tres trabajadores, los cuales fueron atendidos en la T-1 del IMSS, por lo que las autoridades estarán atentas que se cumplan con sus derechos laborales.

“Es una situación complicada. No habíamos tenido el registro de un incidente de este tipo. Hacemos las investigaciones con las demás autoridades para tener el reporte técnico y conocer las circunstancias por las que ocurrió este hecho”, explicó.

Los primeros reportes señalan como causa que una grúa golpeó alguna columna, pero esa versión se determinará mediante una comprobación técnica y una indagación en el aérea.

“La Secretaría ya había realizado una inspección previa y constatamos que tenían los permisos correspondientes, además de las medidas de seguridad, como la colocación de cascos y todas las prevenciones correspondientes, por lo que será a través de las investigaciones que se determinarán las causas”, precisó.

Recordó que en caso de que la empresa constructora, de la cual no quiso emitir su nombre, sea responsable de los hechos, podría ser acreedora a una multa de 50 a cinco mil Unidades de Medida (UMA) y hasta la suspensión de la obra.