Europa, último obstáculo para final Argentina-Brasil
Muchos desean el choque albiceleste y canarinho, pero Holanda y Alemania sueñan con ser los primeros europeos en ganar la Copa en Sudamérica.
Agencias
SAO PAULO, Brasil.- "Brasil, decíme qué se siente tener en casa a tu papá".
Ese es el estribillo del himno no oficial de Argentina en este Mundial, el que sus aficionados han entonado con picardía antes, durante y después de las cinco victorias de su selección -todas por el margen mínimo- y que les tienen en las semifinales del torneo que alberga su más acérrimo adversario futbolístico.
Y la pegajosa canción termina así: "A Messi lo vas a ver, la Copa nos va a traer, Maradona es más grande que Pelé".
De acuerdo con The Associated Press, todo alude al triunfo de Argentina ante Brasil en los octavos de final del Mundial de Italia 1990, que se concretó 1-0 con la única ocasión de gol que tuvo la 'Albiceleste' en ese duelo en Turín, obra de Claudio Caniggia tras un magistral pase de Diego Maradona.
A los argentinos les gusta "picar" a los brasileños con ese resultado, sin importar que la 'Canarinha' conquistó dos títulos en el cuarto siglo posterior y la Albiceleste apenas ahora volvió a disputar las semifinales de un Mundial.
Regreso argentino
Veinte y cuatro años después a ese verano italiano, Argentina vuelve a asomarse entre los cuatro mejores del Mundial y se espera, más que nunca, una inédita final de Copa del Mundo entre los gigantes del fútbol sudamericano, ni más ni menos que en el estadio Maracaná de Río de Janeiro. Morbo absoluto.
Pero aún tienen que sortear un par de durísimos obstáculos frente a selecciones a las que en el pasado doblegaron en finales. Entre Alemania y Holanda, cualquiera podría convertirse en la primera selección europea que se consagra campeona del mundo en territorio americano.
Alemania-Brasil
La primera semifinal se jugará el martes en Belo Horizonte, donde Alemania se medirá con un Brasil muy aturdido por la baja de su astro Neymar, descartado por el resto del torneo tras fracturarse una vértebra en la victoria 2-1 ante Colombia en la ronda de cuartos de final. Será la reedición de la final de 2002 en la ciudad japonesa de Yokohama, en la que Brasil se impuso 2-0 con un doblete de Ronaldo. No hay otro antecedente entre ambas selecciones en el torneo, salvo un triunfo brasileño sobre la desaparecida Alemania Oriental en el Mundial de 1974, organizado por la Alemania Occidental.
Naranja Mecánica-Messi
En la otra semifinal, Lionel Messi liderará a Argentina contra Holanda al día siguiente en Sao Paulo. Será el cuarto enfrentamiento entre ambos en los mundiales, y la Oranje domina en el historial directo con dos victorias, una derrota y un empate. Pero el único triunfo argentino es el más trascendental, el 3-1 en la final del Mundial que montaron en 1978, y que fue el último que se disputó en canchas sudamericanas.
"Podemos convertirnos en el primer equipo europeo que gana un Mundial en Sudamérica", se entusiasmó el delantero Lukas Podolski, cuya Alemania está en semifinales por cuarta vez seguida. "No será fácil, pero ya estamos en esta etapa y nos sentimos fuertes. El Mundial no es un torneo donde gana el que mejor está jugando. Por ahí no siempre jugamos bien, pero nos arreglamos para ganar. No tenemos jugadores de la talla de un Messi o un Neymar, capaces de anotar un gol con algo especial, pero el nuestro es un equipo curtido. Y estamos todos unidos".
Holanda, único sin título
Entre los cuatro que siguen en carrera se contabilizan 10 estrellas de campeón. Holanda es el único que no sabe lo que es ganar el título, ya que le ha tocado perder tres veces el duelo decisivo, incluyendo el de la pasada edición ante España.
Para sintetizar, aquí están un equipo compacto (Alemania), otro que es modelo de disciplina táctica con su entrenador Louis van Gaal (Holanda), uno que depende del genio individual de Messi (Argentina) y el último que ha quedado tocado por la lesión de su máxima figura (Brasil).
Y los alemanes tienen otra cosa que los otros tres semifinales carecen: ningún lesionado de relevancia.
- Brasil no sólo echará de menos a Neymar, sino que a su capitán y zaguero central Thiago Silva por suspensión. En un intento desesperado, los brasileños presentaron un recurso ante la comisión disciplinaria de la FIFA para rescindir el castigo.
- Argentina tiene descartado a Angel Di María, quien se lesionó el muslo derecho en la victoria 1-0 ante Bélgica en las semifinales. Después de Messi, el extremo había sido el jugador más gravitante. La buena noticia es que Sergio Agüero, otro de los integrantes del temido cuarteto ofensivo que completa Gonzalo Higuaín, está recuperado y disponible tras lastimarse en el último partido de la fase de grupos.
- Holanda perdió a su recio volante de contención Nigel De Jong por una lesión en la ingle.
- Caso contrario en Alemania, que en la antesala del torneo sufría con un panorama preocupante. Aparte de perder al mediopunta Marco Reus, el técnico Joachim Loew tenía en enfermería al portero Manuel Neuer, al lateral/volante Philipp Lahm y al centrocampista Bastian Schweinsteiger.
Triunfo de 1962
Más duele en Brasil, que intenta arroparse en el recuerdo del Mundial de 1962. Entonces, Pelé se lesionó en el segundo partido, pero la selección arrasó en los siguientes cinco para revalidar el título.
"No podré cumplir mi sueño de jugar en la final de un Mundial, pero estoy seguro que ellos (el equipo brasileño) saldrán campeones, y ahí estaré con ellos, con todo Brasil, celebrando juntos", dijo Neymar en un mensaje de video.
Pero el problema de este Brasil 2014 con respecto al de 1962 es que quizás no tenga la clase de talento para encadenar dos victorias más. Sin Pelé, ese selección que se consagró en Chile tenía a Garrincha, Amarildo, Vavá y Didí, entre otros. La actual versión, con el reparto que conforman Oscar, Fred y Hulk, deberá crecerse para hacerle realidad el sueño a Neymar.