Agencias
AMMÁN, Jordania.- Ya no habrá riesgos de falsificación de tarjetas de crédito, ni tampoco problemas por extravíos o por códigos olvidados: para retirar dinero del cajero automático o para pagar en el supermercado bastará sólo con "hacerse leer los ojos" a través de un escáner del iris.

Todo esto gracias a un sistema lanzado por una empresa jornada, la Iris Guard, que está exportando la nueva tecnología a todo el mundo, según contó su presidente, Imad Malhas, en una entrevista con la agencia AnsaLatina, que publica en su sitio web.

Centenares de ventanillas ya funcionan con el nuevo equipo patentado por esa empresa en Jordania, en los territorios palestinos y en El Líbano. Desde hace algunas semanas, además, el mismo sistema fue adoptado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) para registrar los centenares de miles de refugiados llegados de Siria.

"Comenzamos hace diez años, porque Jordania tiene recursos limitados y no hay un mercado lo suficientemente vasto. Tuvimos que ampliar nuestras actividades primero a los países árabes del Golfo y luego a Europa y Estados Unidos", aseguró Malhas a ANSA.

"La calidad de nuestro producto es reconocida también por los inversores que llegan desde el exterior", prosiguió el jefe de Iris Guard.

Emiratos Arabes Unidos fue uno de los primeros países en adoptar el nuevo sistema con el objetivo de "controlar" y "registrar" al "gran número de inmigrantes" en Dubai y Abu Dhabi.

El iris -como las huellas digitales- es único por cada individuo y no cambia con la edad

"En Emiratos Arabes Unidos tomamos las 'huellas oculares' de unas 42 millones de personas provenientes de 192 países y descubrimos que unas 660 mil habían sido expulsadas, aunque intentaban regresar con pasaportes falsos", contó Malhas.

Justamente en esa federación, la empresa Iris Guard abrió su primera filial en el exterior.

Luego lo hizo en Gran Bretaña y en Estados Unidos. Se trata de una nueva tecnología que, a juicio de Malhas, está destinada a "revolucionar nuestra vida cotidiana".

El iris -como las huellas digitales- es único por cada individuo y no cambia con la edad. "Será suficiente una imagen de los ojos sin el uso del láser o de alguna radiación peligrosa", aseguró el presidente de la Iris Guard.

Además, para Malhas, "cada ciudadano podrá realizar transacciones bancarias o pagar en el supermercado sin traer consigo tarjetas magnéticas ni dinero, y eliminará así los riesgos de robo o de fraude informático".

La lectura del iris es utilizada en estos días también por ACNUR para asistir a refugiados sirios que, según Amman, ya son 370 mil, de los cuales 70 mil se encuentran en campos mientras los otros están repartidos entre pueblos y ciudades del país.

Miles ya fueron registrados con el nuevo sistema y, con sólo un "examen de ojos", podrán retirar en el banco una cifra mensual destinada a la asistencia.