La decisión del presidente Donald Trump de aplicar un arancel del 25% a las importaciones provenientes de México y Canadá podría tener consecuencias adversas para Estados Unidos, advirtieron expertos en comercio exterior. 

Según los analistas, esta medida perjudicaría a la economía estadounidense y fortalecería la posición de China como principal beneficiario en el comercio global.

Kenneth Smith Ramos, exjefe de la negociación técnica para el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en la Secretaría de Economía, expuso en X (antes Twitter):

"Imponer aranceles de 25% sería un horrible 'balazo en el pie' para la economía estadounidense, que depende en cientos de miles de millones de dólares de las importaciones mexicanas que impulsan la competitividad de su sector manufacturero".

"Imponer aranceles y generar desorden económico en América del Norte tiene un claro ganador: China. La unidad y la integración entre México, Canadá y Estados Unidos son las únicas soluciones a los desafíos económicos de nuestra región. El proteccionismo es una receta para el desastre".

Smith Ramos, ahora socio de la firma Agon, advirtió un impacto en los precios en el mercado estadounidense.

"Buena suerte compitiendo con China si se suspende el T-MEC. Esto también provocaría un aumento inmediato en los precios de productos agrícolas clave en Estados Unidos, como berries, aguacates, tomates, pimientos y cítricos, que en su mayoría provienen de México. El mismo impacto inflacionario se sentiría en cientos de bienes de consumo y electrodomésticos", anticipó.

Además, dio a entender que si México y Canadá responden a los aranceles con medidas similares, todas las partes se pueden enganchar en una escalada en la que nadie tendría nada que ganar y todos perderían.

"México y Canadá se enfrentan al proverbial 'juego de la gallina' y no pueden darse el lujo de parpadear. La presidenta Sheinbaum ha sido clara: si Estados Unidos impone aranceles, México tomará represalias, pero también está dispuesta a iniciar un diálogo constructivo sobre inmigración y seguridad".

Por su parte, Mónica Lugo, directora de Relaciones Institucionales en Prodensa, señaló que el anuncio de Trump es incongruente con sus intenciones de desacelerar la inflación en Estados Unidos.

"Es un 'balazo en el pie' también para Estados Unidos, porque, por un lado, ya dijo la presidenta Claudia Sheinbaum que si hay tarifas, México va a también a tomar represalias, y con razón, porque sería una clara violación al T-MEC".

"No nada más genera una ola inflacionaria por todos los productos que son complementarios, que producimos entre sí; el consumidor final va terminar pagando el precio".

Para la especialista, es necesario que la población estadounidense entienda que la aplicación de aranceles a las importaciones de productos no representa cargos que deba pagar un gobierno, sino las empresas compradoras, que a su vez trasladarán los costos a los consumidores finales.

Lugo también coincidió en que, al incluir a Canadá en la medida, Estados Unidos está provocando fricciones con sus dos principales socios comerciales, lo cual sólo beneficiará a China, país que podrá seguir comerciando a nivel global.

"Va a ser un efecto negativo para los tres países, pero no debería ceder ninguno, ni Canadá, ni México a estas amenazas, y hacer que se retire (la propuesta). Al final, de quien tiene que cuidarse Estados Unidos es de China".

Con información de Reforma