Agencias
LA PAZ, Bolivia.- Entidades defensoras de los animales anunciaron que tomarán el Centro de Zoonosis de Oruro, cuarta ciudad de Bolivia para frenar la matanza de unos 40 mil perros vagabundos que anunció el municipio de esa ciudad del altiplano andino.

La sociedad defensora de animales calificó "salvaje" la medida y pidió a la alcaldesa municipal, Rossio Pimental, "no convertirse en una despiadada" y demostrar "sensibilidad frente a los perros, que no pueden defenderse".

Según el director del servicio departamental de salud, Johnny Vedia, la medida corresponde al plan de control epidemiológico "por la presencia del mal de rabia, especialmente en los barrios suburbanos en los que abundan los canes vagabundos".

Ante la denuncia de varios casos de contagio del mal a humanos y otras especies, en especial camélidos, el municipio declaró emergencia sanitaria para iniciar un programa de erradicación de canes que pululan en los barrios suburbanos, según publica el sitio web ansa.it.

Pero la sociedad defensora de animales alega que "los perros tienen derecho a la vida y demandan que en vez de matarlos se los esterilice, porque no hay nada más lamentable que ver a una pobre perra en celo con otros perros por detrás".

Según Rubén Cáceres García, dirigente de la Sociedad, el municipio de esa ciudad de 250 mil habitantes, otrora centro minero, no tiene presupuestado recursos para mantener con agua y alimentos a por los menos 80 perros que son capturados cada día.

Los defensores de los animales piden que se los mantenga en cautiverio "al menos durante siete días" para dar tiempo a que sus propietarios acudan al lugar, los reconozcan y los retiren.

Por su parte, García Cáceres anunció que grupos de jóvenes "se están organizando para impedir la matanza" y si es necesario tomar el Centro de Zoonosis "donde cada día se elimina a los perros que son capturados".

La protesta gana fuerza en las redes sociales.