Brasil: Cesa Dilma a funcionarios por corrupción

La presidenta separa de sus puestos, entre otros servidores públicos, a una persona de confianza del ex mandatario Luiz Inacio 'Lula' da Silva.

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Dilma Rouseff ordenó investigar a todos los funcionarios involucrados en casos de corrupción. (Reuters)
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Agencias
SAO PAULO, Brasil.- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, suspendió de sus cargos a varios funcionarios en puestos clave acusados de corrupción, entre ellos dos directores de agencias reguladoras, un abogado del gobierno y la responsable por el oficina de la presidencia de la República en la ciudad de Sao Paulo.
   
La determinación ocurrió este sábado mediante un comunicado, luego de que la Policía Federal acusó por corrupción y tráfico de influencia a la jefa de asesores de la presidencia de la República en Sao Paulo, Rosemary Novoa de Noronha, quien había sido nombrada por el ex mandatario Luiz Lula da Silva en 2003.
   
"Todos los funcionarios acusados en la Operación Porto Seguro de la Policía Federal serán alejados o expulsados de sus cargos", dijo Rousseff en un escueto comunicado, en el que también anuncia la apertura de una investigación interna en cada uno de los entes oficiales involucrados.
   
Dos de los acusados son hermanos, directores de la Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) y de la Agencia Nacional de Aguas(ANA), quienes están acusados con Noronha de montar una red dentro de la esfera pública para adulterar informes técnicos y beneficiar a empresarios en licitaciones. El viernes fueron detenidos junto con otras 8 personas, entre abogados y empresarios.

La mandataria ejecuta una 'limpieza ética' del poder público 

También cayó un funcionario clave en la estructura institucional: el número dos de la Abogacía General de la Unión, que depende de la presidencia, José Weber Holanda.
   
La política de Rousseff frente a los sospechados de corrupción, en 2011, estuvo marcada por una línea dura frente a las acusaciones. La mandataria ordenó el año pasado el alejamiento de ocho ministros con denuncias en su contra, con lo cual se la calificó como la ejecutora de una "limpieza ética" en el poder público.

El diario O Globo presentó el caso vinculando a la funcionaria Noronha como una de las principales asesoras de Lula cuando éste trabajaba en la oficina que la presidencia tiene en Sao Paulo.
   
Según el superintendente de la Policía Federal, comisario Roberto Troncon, los funcionarios actuaban por cuenta propia y los jefes de la supuesta red de corrupción eran los hermanos Vieira, directores de agencias reguladoras.
   
El comisario informó que los sospechosos actuaban sin consentimiento de sus superiores en las cúpulas de los órganos federales.
   
La policía allanó el viernes la oficina de la presidencia en Sao Paulo para copiar archivos de las computadoras de Noronha y también actuó en la sede de la Abogacía General de la Unión (AGU), donde retiró documentación perteneciente al número dos del órgano legal del gobierno, Weber de Holanda.
   
Los hermanos Vieira llegaron a sus cargos por indicación de la funcionaria Noronha y con el respaldo de Lula, previa aprobación en el Congreso en 2009.

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