Declaran culpable de abuso a cura irlandés

John O’Reilly fue acusado en Chile por aprovecharse de una menor; piden una pena de 10 años de prisión y prohibición de tareas con niños.

|
El sacerdote de los Legionarios de Cristo, John O’Reilly, fue declarado culpable por abuso contra una estudiante cuando era guía espiritual de la escuela. (Agencia Uno)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencias
SANTIAGO, Chile.- Una corte declaró al sacerdote de origen irlandés John O’Reilly culpable de abusar sexualmente de una menor de edad cuando era capellán de una escuela en la capital chilena, según informó Associated Press.

En su fallo conocido el miércoles, la corte dijo que O’Reilly cometió el abuso cuando era guía espiritual de la escuela Cumbres en Las Condes, un barrio santiaguino de clase alta.

Las familias de dos hermanas acusaron al cura de abusar de las niñas entre 2007 y 2012. La corte lo absolvió en uno de los casos. La sentencia será anunciada el 11 de noviembre.

“El tribunal ha dado por establecido más allá de toda duda razonable, los siguientes hechos (…) que O’Reilly resolvió realizar acciones de significación sexual mediante el contacto corporal con una alumna del colegio”, dijo la jueza María Teresa Barrientos, quien especificó que el sacerdote cometió los abusos varias veces entre 2010 y 2012 durante horas escolares.

O’Reilly, que llegó a Chile a mediados de la década de 1980 y adquirió la ciudadanía en 2008, es miembro de la Legión de Cristo, una orden conservadora antes respetada pero que cayó en desgracia al revelarse que su difunto fundador, el sacerdote mexicano Marcial Maciel, era padre de un niño y había abusado de seminaristas.

Los fiscales pidieron para O’Reilly, quien ha negado los cargos, una pena de 10 años de prisión y que se le prohíba ejercer tareas que incluyan contacto con niños.

La Iglesia católica conserva una fuerte influencia en la sociedad chilena, aunque ha perdido credibilidad desde 2010, cuando cuatro hombres acusaron a uno de los sacerdotes más venerados del país de haber abusado de ellos cuando tenían entre 14 y 17 años.

El Vaticano sancionó al padre Fernando Karadima al ordenarle llevar una vida de “penitencia y oración”. La justicia desestimó el caso porque había prescrito, pero sostuvo que las acusaciones eran verídicas.

Lo más leído

skeleton





skeleton