El nuevo jefe del Comando Norte de Estados Unidos, Gregory Guillot, destacó que los cárteles del narcotráfico generan condiciones de inestabilidad en México y muestran una creciente propensión a enfrentarse directamente a las fuerzas de seguridad mexicanas.

Durante su primera comparecencia en el Capitolio tras haber llegado al cargo el mes pasado, Guillot aseguró que las condiciones de inestabilidad e ilegalidad creadas por los cárteles representan una oportunidad que adversarios de Estados Unidos -incluidas otras potencias- puedan aprovechar justo al sur de la frontera. 

"Las organizaciones criminales transnacionales en México, y en otras partes del Hemisferio Occidental, continúan fomentando inestabilidad y desafiando el Estado de Derecho", dijo Guillot en su testimonio escrito presentado ayer ante el Comité de Fuerzas Armadas de la Cámara Baja de Estados Unidos.

"Esto crea oportunidades potenciales para que nuestros adversarios estatales y no-estatales amplíen su acceso e influencia a lo largo de nuestro flanco Sur".

"Los cárteles también han demostrado una creciente disposición a enfrentarse directamente con el Ejército, las fuerzas de seguridad y los funcionarios gubernamentales mexicanos, lo que destacando la necesidad de una cooperación continua en materia de seguridad con nuestros socios en México".

Guillot destacó el estado actual de las relaciones que mantiene el Comando Norte con sus contrapartes mexicanos -la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de Marina (Semar)- lo que permite luchar contra amenazas transnacionales y otras potencias.

"Los vínculos entre el Comando Norte de Estados Unidos y nuestros socios militares mexicanos son amplios, resistentes y están enfocados en expandir nuestra capacidad combinada para defender y proteger a América del Norte de innumerables amenazas estatales y no estatales", dijo Guillot en su testimonio.

Reduce México dependencia militar de China y Rusia

Sin describir los esfuerzos en detalle, Gregory Guillot destacó que el Pentágono ha invertido en años recientes para reducir la dependencia de las Fuerzas Armadas mexicanas de equipo y armamento proveniente de China y Rusia, las dos principales potencias con las que Estados Unidos compite. 

"Contrarrestar la influencia de los competidores en la región sigue siendo una prioridad clave para el Comando Norte de Estados Unidos y para nuestros socios militares mexicanos. Y como resultado directo, los ejércitos de Estados Unidos y México son más compatibles operativamente que en cualquier otro momento", dijo Guillot.

"Estos esfuerzos e inversiones han fortalecido simultáneamente nuestra seguridad común y al mismo tiempo han ayudado a reducir la dependencia de México de equipos y contratos rusos y de la República Popular China, que a menudo vienen con costosas condiciones", añadió el jefe del Comando Norte.

Con información de Reforma