Brian Jeffrey Raymond, un exagente de la CIA de 48 años, fue condenado a 30 años de prisión por drogar, agredir sexualmente y fotografiar a más de 20 mujeres mientras estaba en misiones en diferentes países como México y Perú. La sentencia fue emitida por la jueza federal Colleen Kollar-Kotelly, quien lo describió como un “depredador sexual”.

Las agresiones de Raymond, que se remontan a 2006, quedaron al descubierto tras el hallazgo de más de 500 fotografías de mujeres inconscientes en poses comprometedoras.

A CIA officer has been sentenced to 30yrs in prison for the sexual abuse of 25 women in multiple countries.

Since 2006 he coerced women from dating apps, drugged them, sexually assaulted, & photographed them in government leased housing.

Meet Brian Jeffrey Raymond. pic.twitter.com/0WIJxsrowf

— dara faye (@darafaye) September 19, 2024

Raymond conocía a sus víctimas a través de aplicaciones de citas como Tinder. Las llevaba a su apartamento, alquilado por el gobierno, donde las drogaba y las fotografiaba mientras estaban desnudas e inconscientes. El caso se destapó cuando el FBI mostró las fotografías a las mujeres, muchas de las cuales no sabían que habían sido víctimas hasta ese momento.

Durante la audiencia, varias de las víctimas, identificadas solo por números, compartieron el impacto que las agresiones de Raymond tuvieron en sus vidas. Una de ellas describió cómo su imagen, "como un cadáver", aparecía en las fotos. Otras hablaron sobre las secuelas emocionales y psicológicas, como crisis nerviosas, pérdida de confianza y trastornos postraumáticos.

Sentencia histórica en la CIA por abusos sexuales

Raymond, abatido en la corte, expresó su remordimiento diciendo que había "traicionado todo lo que defendía". A pesar de sus disculpas, la jueza le impuso la pena máxima y le ordenó pagar 10.000 dólares a cada una de las 28 víctimas.

Este caso ha sido calificado como uno de los más graves en la historia de la agencia de inteligencia, afectando la confianza en instituciones que deben proteger al público. La sentencia de 30 años subraya la gravedad de los crímenes de Raymond.

(Con información de The Associated Press)