Agencias
CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Francisco -el exarzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio- recordó hoy la fiesta de San Jorge, en la cual celebra su onomástico, con una misa en la Capilla Paolina del Vaticano junto con otros cardenales, durante la cual recordó que "no es posible hallar a Jesús fuera de la Iglesia".

El cardenal decano Angelo Sodano, en nombre del grupo de purpurados, saludó al Papa afirmando que "en esta fecha los hermanos cardenales presentes en Roma desearon estrecharse en torno a usted, que lleva el bello nombre de este santo, para agradecer al Señor los dones concedidos e implorar abundantes dones para su ministerio petrino".

"Con este espíritu de comunión fraterna -agregó Sodano- los cardenales le desean todo bien", pidiendo también el don de la "fortaleza cristiana para aquellos que sufren por la fe, desde el momento en que -como usted nos recordó- no ha terminado el tiempo de los mártires".

De acuerdo con el sitio web ansa.it, Francisco agradeció a los cardenales: "Me siento bien recibido por ustedes. Gracias, me siento bien con ustedes: a mí me gusta esto".

Luego, el Papa afirmó que "la identidad cristiana no es una tarjeta de identidad: la identidad cristiana es una pertenencia a la Iglesia, a la Iglesia madre", porque "no es posible hallar a Jesús fuera de la Iglesia".

"Es una dicotomía absurda querer vivir con Jesús sin la Iglesia -explicó Francisco-, seguir a Jesús fuera de la Iglesia, amar a Jesús sin la Iglesia".

"La Iglesia madre nos da a Jesús -afirmó en la homilía-, nos da la identidad que no es solamente un sello, es una pertenencia: identidad significa pertenencia, pertenencia a la Iglesia, y esto es bello".

En la misa, el Papa habló también de la "misionalidad" de la Iglesia y el hecho de que el verdadero camino cristiano y la vida de la Iglesia proceden siempre de las "persecuciones del mundo" a los "consuelos del Señor".

"Si queremos andar un poco por el camino de la mundanidad -explicó-, negociando con el mundo como querían hacer los Macabeos, nunca tendremos el consuelo del Señor. Y si buscamos solamente el consuelo, será un consuelo superficial y no el del Señor".

Al término de la misa, Francisco y los cardenales salieron al patio de San Dámaso, donde la banda de la Guardia Suiza dio un pequeño concierto en homenaje al Papa. Luego fue llevado un pastel realizado para la ocasión.