La Justicia peruana ha decidido este lunes anular el proceso judicial contra Keiko Fujimori, líder del partido Fuerza Popular, y más de 30 coacusados en el emblemático caso 'Cócteles', que investiga presuntos delitos de lavado de activos y organización criminal.

Esta decisión surge tras una sentencia del Tribunal Constitucional que previamente desestimó las acusaciones contra José Chlimper, exdirigente de la misma organización política.

El caso, que debe ahora regresar a la etapa de control de acusación, incluye a figuras cercanas a Fujimori, como su exesposo Mark Vito y otros altos dirigentes del partido: Jaime Yoshiyama, Pier Figari y Ana Hertz.

La resolución también exige que las autoridades subsanen cualquier error procesal antes de avanzar en el proceso, según lo informado por la emisora local RPP.

El caso 'Cócteles' toma su nombre de los eventos de recaudación organizados por Fuerza Popular desde 2016, cuya finalidad era financiar las campañas presidenciales de Keiko Fujimori.

Según la hipótesis de la Fiscalía, estas actividades encubrían aportaciones ilícitas que luego eran “blanqueadas” mediante el denominado 'pitufeo', un método que fracciona grandes cantidades de dinero en pequeños montos para evadir controles bancarios.

Una de las principales líneas de investigación se centra en un aporte de un millón de dólares realizado por la constructora brasileña Odebrecht, implicada en numerosos casos de corrupción en América Latina. Asimismo, Credicorp, el mayor conglomerado financiero del país, también habría contribuido de manera irregular a las campañas de Fujimori en 2011 y 2016.

La anulación del juicio supone un giro significativo en uno de los casos más emblemáticos de la política peruana reciente, pues Keiko Fujimori ha sido una de las figuras más polémicas y ha enfrentado investigaciones que cuestionan la legalidad de sus actividades políticas y financieras.

(Con información de Reforma)