Agencias
ISLAMABAD, Pakistán.- Al menos 72 personas perdieron la vida y alrededor de 150 más resultaron heridas en un atentado suicida perpetrado hoy en un concurrido santuario islámico en la ciudad de Sehwan, en el sur de Pakistán, informaron autoridades locales, según publicó Notimex.

El ataque ocurrió la noche de este jueves en el interior del santuario sufí de Lal Shahbaz Qalandar en momentos en que se encontraba abarrotado de fieles que participaban en el “dhamaal”, un ritual de esa rama del Islam, después de las oraciones vespertinas.

“Hasta el momento, 72 muertos y más de 150 heridos”, precisó AD Khawaja, inspector general de la policía de la provincia de Sindh, donde se encuentra Sehwan, y afirmó que muchos de los lesionados se encuentran en estado crítico, por lo que la cifra mortal podría elevarse.

Los heridos de gravedad están siendo trasladados para ser atendidos en hospitales de la ciudad de Karachi a bordo de helicópteros de las fuerzas armadas paquistaníes y un avión C-130, añadió Khawaja.

El comisionado adjunto de la Policía, Munawar Maheesar, confirmó el balance de víctimas y detalló que entre los muertos se han contabilizado hasta ahora al menos cuatro niños y 12 mujeres, de acuerdo con reportes del periódico paquistaní The Dawn.

La policía de Sehwan señaló que un atacante suicida entró al santuario a través de su puerta de oro y lanzó una granada que no llegó a explotar, pero enseguida se inmoló provocando una potente explosión que además de muerte y heridas, causó pánico y una estampida en el interior del complejo.

El santuario sufí se encontraba lleno de personas porque un gran número de devotos del Islam, procedentes de Sindh y otras provincias del país, frecuentan ese recinto los días jueves, ya que el dhamaal tiene un significado espiritual en la cultura de Pakistán.

Inmediatamente después del ataque, que llevó al reforzamiento de la seguridad en toda la provincia de Sindh, el primer ministro paquistaní Nawaz Sharif condenó el atentado en Lal Shahbaz Qalandar y pidió a la población impedir que este tipo de eventos cause divisiones o miedo.

“Debemos estar unidos en esta lucha por la identidad y la seguridad de Pakistán, y de la humanidad universal”, sostuvo el jefe de gobierno.

El jefe del Estado Mayor del Ejército de Pakistán, general Javed Qamar Bajwa, llamó al país a mantener la calma, asegurando que “las fuerzas de seguridad no permitirán que los hostiles tengan éxito”, reportó por separado el canal de televisión local GEO.

Los santuarios musulmanes en Paskistán a menudo han sido blancos de grupos militantes, muchos de los cuales se adhieren a una interpretación estricta del Islam que se refiere a la veneración en santuarios como una herejía.