La Organización de las Naciones Unidas (ONU) anunció que reducirá temporalmente su presencia en la Franja de Gaza luego de que un ataque atribuido a un tanque israelí impactara uno de sus complejos el 19 de marzo. 

De acuerdo con el organismo internacional, el incidente dejó un trabajador muerto y cinco heridos.

Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, confirmó que aproximadamente un tercio de los 100 empleados internacionales que operan en Gaza serán reubicados temporalmente debido al creciente riesgo en la zona.

La decisión llega en plena intensificación de la ofensiva israelí, que ha dejado cientos de víctimas palestinas en la última semana y ha paralizado el ingreso de alimentos, medicinas y otros suministros esenciales desde hace tres semanas.

En su comunicado, Dujarric señaló por primera vez a Israel como responsable del ataque al complejo de la ONU en el centro de Gaza, afirmando que, ‘según la información disponible’, el impacto fue causado por un tanque israelí. 

Sin embargo, el ejército israelí negó nuevamente su participación en el hecho, que ocurrió apenas un día después del fin de un alto el fuego de dos meses con un bombardeo sorpresa sobre todo el territorio.

A pesar de la reducción de personal, la ONU enfatizó que no abandonará Gaza y que continuará con sus operaciones humanitarias a través de sus 13 mil empleados locales, en su mayoría pertenecientes a la agencia para los refugiados palestinos.

ESCALADA DE VIOLENCIA EN GAZA DEJA DECENAS DE VÍCTIMAS

En las últimas 24 horas, más de 60 palestinos han muerto en ataques israelíes en distintas zonas de Gaza, según el Ministerio de Salud local. La institución también publicó una lista con los nombres de más de 15 mil menores fallecidos desde el inicio de la ofensiva israelí hace 17 meses, incluyendo casi 5 mil niños menores de seis años y 876 bebés de menos de un año.

Israel, que lanzó su campaña militar en respuesta al ataque de Hamás en octubre de 2023, ha justificado la reanudación de las hostilidades y la restricción de suministros como una estrategia para presionar al grupo islamista a aceptar nuevas condiciones para un alto el fuego y la liberación de rehenes. 

Aunque asegura que sus ataques se dirigen contra combatientes y posiciones de Hamás, responsabiliza al grupo por las muertes de civiles debido a su supuesta estrategia de operar dentro de áreas pobladas.

Con información de AP