El Papa pide rechazar el materialismo

Francisco dijo que a jóvenes católicos que deben dejar los "inhumanos" sistemas económicos que privan de derechos a los pobres.

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Durante su encuentro con jóvenes católicos en el Santuario Solmoe en Dangjin, Corea del Sur, el Papa Francisco recibió una playera con su imagen como regalo. (Agencias)
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Agencias
DAEJEON, Corea del Sur.- El Papa Francisco instó el viernes a los jóvenes católicos a renunciar al materialismo que aflige a gran parte de la sociedad asiática hoy y a rechazar los "inhumanos" sistemas económicos que privan de derechos a los pobres, impulsando su agenda económica en una potencia regional donde las ganancias financieras son un termómetro clave de éxito.

Francisco recibió una bienvenida bulliciosa de decenas de miles de jóvenes asiáticos mientras celebraba su primera misa pública en Corea del Sur, un país con una pequeña pero creciente iglesia que el Vaticano considera un modelo para el resto del mundo.

De acuerdo con The Associated Press, el Papa tomó un tren de alta velocidad desde Seúl a la ciudad central de Daejeon, donde los jóvenes católicos han estado reunidos para la versión asiática de la Jornada Mundial de la Juventud. En su homilía, Francisco instó a los participantes a ser una fuente de renovación y esperanza para la sociedad.

"Que puedan combatir el encanto de un materialismo que ahoga auténticos valores espirituales y culturales y el espíritu de la competencia desenfrenada que genera egoísmo y contienda", dijo Francisco en un discurso pronunciado en italiano que fue traducido al coreano. "Que ellos también rechacen los modelos económicos inhumanos que crean nuevas formas de pobreza y marginan a los trabajadores".

Su mensaje será difícil de vender en Corea del Sur, que ha pasado de la destrucción y la pobreza de la Guerra de Corea de la década de 1950 a convertirse en una de las principales economías de Asia. Muchos vinculan el éxito con exhibiciones ostentosas de estatus y riqueza, y las cirugías plásticas son un negocio en auge. La competencia entre los jóvenes, especialmente por plazas en las escuelas de élite, comienza desde antes del jardín infantil y es feroz. El país tiene una de las tasas de suicidio más altas del mundo.

Francisco dijo que en tales sociedades "exteriormente opulentas", las personas a menudo experimentan "tristeza interior y vacío", una desesperación que asemajó a un cáncer que crece en la sociedad.

El estadio de fútbol de Daejeon, con capacidad para 50 mil espectadores, estaba casi lleno horas antes de la llegada de Francisco.

Antes de la misa, Francisco se reunió en privado con una decena de sobrevivientes de la tragedia de un transbordador surcoreano en abril, así como familiares de los muertos, que exigen una investigación del gobierno sobre el hundimiento. Uno de ellos, Lee Ho Jin, cuyo hijo falleció, pidió al papa que lo bautizara, dijo el portavoz del Vaticano, el reverendo Federico Lombardi.

Católicos aplauden visita

Por su parte, los católicos chinos aplaudieron el viernes la visita del Papa Francisco a la vecina Corea del Sur y expresaron esperanzas de que su viaje a la región ayude a poner fin al distanciamiento entre su gobierno y el Vaticano.

Sin embargo, los medios de comunicación chinos enteramente manejados por el Estado impusieron un virtual bloqueo informativo sobre su visita, asegurando que el público en general se enterara de poco acerca de las actividades de Francisco.

En otra señal de la continua ambivalencia de Beijing hacia las relaciones con la Santa Sede, informes dijeron que las autoridades estaban impidiendo a algunos católicos y clérigos chinos participar en las actividades en Corea del Sur bajo amenaza de represalias.

En una señal prometedora, la primera visita de Francisco a Asia incluyó la primera vez que el Papa cruza el espacio aéreo chino, el jueves, ocasión que aprovechó para enviar un telegrama en el que expresó saludos y oraciones al presidente Xi Jinping y el pueblo chino.

El ministerio de relaciones exteriores chino respondió el jueves con un comunicado diciendo que seguía comprometido para establecer un "diálogo constructivo" y mejorar los lazos.

El viernes, laicos y sacerdotes católicos que asistieron a una misa en la iglesia más antigua de Beijing dijeron que se sentían más cerca del papa y expresaron esperanzas de una visita del Pontífice a su país en un futuro no muy lejano.

China rompió relaciones con la Santa Sede en 1951 después de que el Partido Comunista oficialmente ateo tomó el poder y estableció su propia iglesia fuera de la autoridad papal. China persiguió a la iglesia durante años hasta que restauró cierto grado de libertad religiosa y liberó sacerdotes encarcelados a finales de la década de 1970.

Los nexos han sido tensos por la decisión de Beijing de que el país tiene el derecho a nombrar obispos, incluso aquellos inaceptables para el Vaticano. La Santa Sede afirma que esa prerrogativa le pertenece exclusivamente.

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