Agencias
CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa lanzó hoy un llamado para que "las personas de buena voluntad" se unan a la "condena" mundial de los atentados de ayer en Bruselas que traen sólo "muerte, terror y horror", según publicó el sitio web de Ansa latina.

El Pontífice manifestó además su dolor por los muertos y los numerosos heridos y su cercanía a los familiares y a todo el pueblo de Bélgica.

"A todos les pido que perseveren en la oración y que rueguen al Señor, en esta Semana Santa, que conforte los corazones afligidos y que convierta los corazones de estas personas enceguecidas por el integralismo cruel", afirmó Francisco durante la audiencia general de los miércoles en plaza San Pedro en una nueva intervención tras la masacre perpetrada el martes en el corazón de Bélgica y de Europa.

"Con el corazón dolido, dijo Jorge Bergoglio ante unos 20 mil fieles, he seguido las tristes noticias de los atentados ocurridos ayer en Bruselas, que causaron numerosas víctimas y heridos, aseguro mi oración y cercanía a la querida población belga y a todos los familiares de las víctimas, a todos los heridos y dirijo nuevamente un llamado a todas las personas de buena voluntad para unirse a la unánime condena de estas actos abominables".

"Oremos por la intercesión de la Virgen María. Hagamos la oración". Luego recitó un "Ave María" y reanudó: "ahora en silencio, oremos por los muertos, por los heridos, por los familiares y por todo el pueblo belga".

Ayer, apenas informado de los atentados, Bergoglio había enviado un mensaje de pésame al arzobispo de Bruselas Josef De Kesel, en el cual condenaba "de nuevo la violencia ciega" e invocaba "de Dios el don de la paz".

También en el texto de hoy tiene la mano a los hombres de buena voluntad, de cualquiera o de ninguna religión, para afrontar los nuevos sufrimientos y temores desencadenados por el terrorismo.

La audiencia general había sido dedicada a la explicación del triduo pascual, el jueves, viernes y sábado santo, como señal del misterio de Dios, que a veces parece callar frente al sufrimiento de la humanidad.

Francisco llegó a la plaza poco antes de las 9.30 y llevó a cabo una amplia vuelta en el papamóbil descubierto, deteniéndose a saludar en particular a los niños que le acercaban los fieles.

La música de una banda acompañó todo el recorrido, dando un tono alegra al encuentro entre el Papa y los peregrinos, pese a las inevitables preocupaciones por la seguridad, tras los atentados de ayer en Bruselas.

Y casi al final de la audiencia, Francisco formuló su llamado.