Agencias
CIUDAD DEL VATICANO.- La plegaria "no es una varita mágica", sino que requiere confiarse a Dios "aunque no comprendamos su voluntad", "Dios cumple la plegaria, si bien eso no significa que lo haga en los modos y tiempos que quisiéramos".

Esto dijo el papa Francisco en la audiencia general de la Plaza San Pedro, ante más de 20 mil personas, comentando la parábola del juez injusto y de la viuda que, con insistencia, le pedía que se hiciera justicia, informa la agencia Ansa Latina.

"Hay que rezar siempre", recordó el Papa, no sólo cuando se siente la necesidad, porque "sin la plegaria la fe vacila".

La viuda, indefensa y sin tutela en la sociedad de su tiempo, "recurre a su única arma, seguir importunando al juez con su pedido de justicia, y justamente con esta perseverancia consigue su objetivo: el juez le da el gusto no por su conciencia o la ley, sino para sacársela de encima.

De esto, explicó el Pontífice, Jesús saca una doble conclusión: si la viuda logró doblegar al juez deshonesto, cuanto más Dios, que es padre bueno, hará justicia a los suyos que gritan hacia él, y además no los hará esperar mucho sino que actuará prontamente. Sin embargo "la plegaria -observó Francisco- no es una varita mágica, debemos confiarnos a él aun cuando no comprendemos la voluntad y en esto Jesús mismo que rezaba tanto nos da el ejemplo".

También en la plegaria llena de "angustia" de Jesús en Getsemaní, comentó el Papa, "el objeto de la plegaria pasa a segundo plano y lo que importa antes que nada es la relación con el Padre. Eso hace la plegaria -subrayó-, transforma el deseo y lo modela según la voluntad de Dios".

Niños desaparecidos

Al término de la audiencia general, Francisco recordó que hoy es la Jornada Internacional de los Niños Desaparecidos. "Es un deber de todos -dijo- proteger a los niños, sobre todo los expuestos a un elevado riesgo de explotación, trata y conductas desviadas".

"Auspicio -agregó- que las autoridades civiles y religiosas puedan sacudir y sensibilizar las conciencias, para evitar la indiferencia frente al malestar de niños solos, explotados y alejados de sus familias y su contexto social, niños que no pueden crecer serenamente y mirar con esperanza al futuro".

El Papa también pidió rezar por las víctimas de los atentados cometidos el lunes en Siria.

Más temprano, al entrar en la audiencia general, Francisco vio a un grupo de unas 60 personas del Ente Nacional de Sordos de Florencia, y los saludó desde el papamóvil en lengua de señas. El grupo, a su vez, respondió al Papa de igual modo.