Popotes de papel: la próxima prohibición de Donald Trump en EU
El mandatario ha manifestado su intención de que el gobierno utilice exclusivamente los popotes de plástico.
A pesar de ser presentadas como una alternativa amigable con el medio ambiente, los popotes de papel parecen no ser del agrado del presidente Donald Trump, quien anunció que prohibirá su uso en Estados Unidos.
El mandatario declaró que esta prohibición tiene una razón: a su juicio, este tipo de popotes ‘no funcionan’ y su tiempo de duración es bastante corto, por lo que la solución al problema es que el gobierno adopte exclusivamente los popotes de plástico.
“Es una situación ridícula. Vamos a volver a los popotes de plástico”, declaró Trump al firmar la orden, que revierte políticas federales diseñadas para fomentar el uso de alternativas más sostenibles.
La medida instruye a las agencias gubernamentales a dejar de adquirir popotes de papel y eliminar su distribución en instalaciones oficiales.
Esta decisión marca un giro respecto a la estrategia ambiental impulsada por su predecesor, Joe Biden. En 2022, la administración Biden implementó un plan para reducir gradualmente los plásticos de un solo uso en servicios federales, con la meta de eliminarlos por completo para 2035.
Trump, quien ha criticado repetidamente las restricciones a los popotes de plástico, reafirmó su postura en redes sociales al declarar que la política de Biden está “¡MUERTA!”. Cabe recordar que, durante su campaña de reelección en 2019, el mandatario comercializó popotes de plástico reutilizables con su nombre, vendiéndolas a 15 dólares por paquete de diez.
Si bien el impacto de los popotes de plástico en la contaminación marina ha sido objeto de debate, numerosos estudios señalan que los plásticos de un solo uso representan una amenaza ambiental más amplia.
En varias ciudades y estados de Estados Unidos, ya se han implementado restricciones al uso de estos productos, y muchos restaurantes han dejado de ofrecer popotes de manera automática.
El problema, sin embargo, va mucho más allá de las pajitas. Cada año, millones de toneladas de plástico terminan en los océanos, provenientes de botellas, bolsas, envases y otros residuos. A medida que estos desechos se degradan, generan microplásticos que son detectados en la fauna marina y recientemente, en el organismo humano.
Con información de AP