El presidente chino Xi Jinping emprende una gira por Europa, enfrentando tensiones en torno a la influencia china y las relaciones transatlánticas. Xi busca restablecer lazos con líderes europeos y fortalecer los lazos comerciales.

El viaje de Xi comienza en Francia, donde se enfrenta a demandas de respeto a los derechos humanos para tibetanos y uigures. Estas preocupaciones se han traducido en protestas en su llegada al país.

El presidente francés Macron recibirá a Xi con honores de visita de Estado. Durante su encuentro, se espera que aborden la necesidad de prácticas comerciales equitativas y el papel de China en el conflicto en Ucrania.

Xi también visitará Serbia y Hungría, países que han recibido importantes inversiones chinas y se consideran cercanos a Rusia. Este viaje es vigilado de cerca tanto en Europa como en Washington, en medio de la incertidumbre sobre el apoyo transatlántico y la política exterior de China.

El comercio entre Europa y China es significativo, ascendiendo a 2.300 millones de euros diarios. Sin embargo, existen preocupaciones sobre subsidios chinos a fabricantes de vehículos eléctricos y acusaciones de espionaje en capitales europeas.

Aunque China afirma ser neutral en el conflicto de Ucrania, se le acusa de aumentar la capacidad rusa de fabricación de armas. La Unión Europea ha iniciado investigaciones sobre los subsidios chinos y podría imponer aranceles a los vehículos eléctricos exportados por China.

(Con información de AP)