Agencias
PARÍS, Francia.- El príncipe saudita Fahd al-Saoud, fanático del ratón Mickey, gastó 15 millones de euros en el parque Disneyland París, donde organizó una fiesta especial para 60 personas dedicada a festejar su graduación.

Con alma de niño en cuerpo de adulto, el gesto de Fahd al-Saoud confirma lo que los responsables del viejo Eurodisney decían desde hace tiempo: el parque no está reservado solo a los niños, sino que puede ser una buena experiencia también para los adultos, según publica el sitio web ansa.it.

Al menos para los que pueden como el príncipe saudí gastar 15 millones de euros para una estadía de tres días, a fines de mayo, durante los cuales reservó las atracciones y organizó varios espectáculos para sus invitados, según contó el diario regional Ouest France.

Este año organizó también una expedición llamada "Disney dreamers everywhere"

"El evento fue organizado a título privado" de parte de un servicio dedicado a las reservas especiales de parte de comitivas de empresas o particulares.

Durante la estadía el príncipe, que celebraba haber conseguido un diploma, "privatizó el parque": es decir que algunos espacios le estuvieron reservados durante todo el día, pero también por la mañana antes de la apertura y por la noche después del cierre.

En total Fahd invitó a unas "60 personas", entre ellas amigos pero también simples fanáticos de Disneyland.

Para ellos se organizaron algunos espectáculos a medida, incluyendo "personajes rraros": También se creó, contó al diario uno de los organizadores, un "servicio de seguridad especial" para este visitante, uno de los mejores clientes de los parques Disney.

Según el diario Metronoews, fue el propio príncipe quien concibió algunos de los espectáculos. "Escribe el show, envía el guión a Disney, que indica lo que es realizable, y luego hace las debidas correcciones", explicó una fuente citada por el periódico.

Fahad Al Saud es conocido por su afición al ratón Mickey y los personajes de Disney.

Este año organizó también una expedición llamada "Disney dreamers everywhere", durante la cual previó visitar todos los parques temáticos dedicados a célebres personajes norteamericanos, entre ellos los Hong-Kong, Tokio y Los Angeles.