Prohíben a sacerdotes estar a solas con niños en Argentina

Arzobispo de Paraná emite normas específicas para erradicar casos de abuso en la Iglesia.

|
Las medidas norman el trato con menores de edad y adultos vulnerables. (Internet)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencia
BUENOS AIRES, Argentina.- Los curas bajo el mandato del Arzobispado de Paraná, en la provincia argentina de Entre Ríos, no pueden tener contacto físico con niños, tienen prohibido compartir con ellos habitaciones de hotel o cualquier otro sitio y cuando escuchen sus confesiones tendrán que dejar la puerta de la sacristía abierta.

Además, de acuerdo con información de El País, si deben viajar en auto con un menor, el sacerdote procurará la presencia de otro adulto. El listado pertenece a un protocolo de buena conducta elaborado por las autoridades eclesiásticas para prevenir abusos sexuales, una solución de emergencia ante la sucesión de hechos de pedofilia grave en esa arquidiócesis del interior del país, donde se agrupa casi medio millón de fieles.

También te puede interesar: Cero difusión a casos de pederastia, pide Cardenal en libro

El listado es directo y crudo en sus recomendaciones, para que no queden dudas. Se titula Normas arquidiocesanas de comportamiento en el trato con menores de edad y adultos vulnerables, y uno a uno enumera los comportamientos que están prohibidos. Fue presentado por el obispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari, sin mucha pompa, pero su contenido fue publicado en la web para que todos puedan verlo.

Los sacerdotes saben ahora que no podrán “realizar cualquier insinuación, comentario o chiste sexual”, “poseer o exhibir cualquier material sexual o pornográfico” o “involucrarse en conductas sexuales secretas o manifiestas”, con menores de edad. El contacto físico también está terminantemente prohibido, y si “es el menor o el adulto vulnerable quien inicia gestos como un abrazo, la respuesta debe ser sobria, breve y apropiada, y siempre en lugares públicos y delante de otras personas”.

Desde el Vaticano, el papa Francisco exigió años atrás "tolerancia cero" contra los curas pederastas. La Conferencia Episcopal Argentina recomendó entonces a cada diócesis que elabore un código de abordaje de las denuncias. Puiggari cumplió con la orden y sumó además el listado de normas de convivencia entre curas y menores.

Lo más leído

skeleton





skeleton