El presidente Joe Biden recibió un llamado bipartidista por parte de una docena de senadores estadounidenses para revitalizar el poder de las autoridades de Estados Unidos para confiscar los activos petroleros iraníes bajo un programa de aplicación que, según dicen, se ha dejado debilitar.

A pesar de las sanciones existentes, las exportaciones de petróleo iraní aumentaron un 35% el año pasado y las ganancias se utilizan para patrocinar ataques contra ciudadanos y militares estadounidenses, así como contra aliados, aseguraron los senadores en una carta al presidente.

El jueves, se mostró el riesgo que se vive en el mar, cuando comandos enmascarados de la Marina iraní se apoderaron de un petrolero con destino a Estados Unidos en el Golfo de Omán, uno de varios barcos que ha tomado como moneda de cambio en las negociaciones con Occidente. Sin proporcionar evidencia, Teherán aseveró que el petrolero había chocado con un barco iraní.

Reportan falta de operaciones de incautación por falta de dinero 

Específicamente, los senadores, encabezados por el republicano Joni Ernst de Iowa y el demócrata Richard Blumenthal de Connecticut, ambos de la Comisión de Servicios Armados, se quejaron de que la oficina de investigaciones de seguridad del Departamento de Seguridad Nacional se ha visto limitada en las operaciones de incautación por falta de dinero.

Desde que comenzó el programa de cumplimiento en 2019, la oficina ha incautado casi 228 millones de dólares en crudo y fuelóleo iraníes vinculados al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, designado como organización terrorista por Estados Unidos, aseguraron los senadores en la carta enviada la semana pasada.

Pero afirmaron que la oficina no ha recibido recientemente dinero disponible bajo el Fondo de Confiscación del Tesoro para realizar incautaciones de petróleo iraní.

(Con información de AP)