Lo nuevo en el gobierno británico bajo Keir Starmer se enfoca en desmantelar el polémico plan de deportación a Ruanda, presentado por su predecesor, Boris Johnson. En su primera conferencia de prensa desde la victoria del Partido Laborista, Starmer afirmó que el plan estaba "muerto y enterrado" antes de su implementación, criticándolo como ineficaz y costoso.

Esta medida había sido propuesta como una forma de disuadir a los migrantes de cruzar peligrosamente el Canal de la Mancha hacia el Reino Unido.

El primer ministro expresó su compromiso con un cambio gradual pero efectivo, aunque no detalló plazos concretos para mejoras en los servicios públicos o niveles de vida.

🇬🇧Durante su primera reunión de Gabinete, el recién electo primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, anuncia que plan para deportar a solicitantes de asilo está “muerto y enterrado” (‘Plan Ruanda’) pic.twitter.com/naLBkBNIcm

— Data Viva (@data_viva) July 7, 2024

Con un gabinete históricamente diverso, Starmer destacó la inclusión de 11 mujeres y la representación de ministros con experiencias de vida variadas, buscando así distanciarse de la élite tradicionalmente asociada con los conservadores.

El desafío principal de Starmer incluye revitalizar la economía lenta, resolver los problemas crónicos del Sistema Nacional de Salud (NHS) y restaurar la confianza en el gobierno después de años de austeridad y caos político. Además, se espera que aborde la cuestión migratoria de manera más humanitaria y efectiva, buscando alternativas al fallido plan de Ruanda mientras enfrenta críticas de figuras conservadoras como Suella Braverman, quien lamentó la reversión de políticas largamente elaboradas.

El nuevo líder laborista también tiene en agenda visitas a las cuatro naciones del Reino Unido, seguidas de reuniones internacionales importantes, como la cumbre de la Comunidad Política Europea y encuentros con líderes globales clave.

Starmer ha subrayado la urgencia de reformar el NHS y resolver las disputas salariales que han afectado a los profesionales médicos, reiterando su visión de un sistema de salud "roto" que necesita una atención inmediata y sin rodeos para ser reparado.

Este inicio de mandato marca un cambio significativo en la dirección política del Reino Unido bajo Starmer, quien se posiciona como un líder comprometido con la equidad, la eficiencia y la recuperación económica nacional.

(Con información de The Associated Press)