Los líderes de la Unión Europea anunciaron los nombramientos de tres altos funcionarios para sus principales instituciones políticas. Destaca la reinstalación de la conservadora alemana Ursula von der Leyen como presidenta de la Comisión Europea, quien continuará en el cargo por otros cinco años, reafirmando su papel en la dirección del poder ejecutivo de la UE.

Acompañando a Von der Leyen en esta nueva etapa estarán dos figuras emergentes: Antonio Costa de Portugal, quien asumirá la presidencia del Consejo Europeo, y Kaja Kallas de Estonia, designada como la nueva máxima diplomática del bloque.

El primer ministro polaco, Donald Tusk, expresidente del Consejo Europeo, expresó su satisfacción con las decisiones tomadas. "Para Polonia y para Europa", afirmó, subrayando la importancia de estos nombramientos para el futuro del continente.

A pesar del respaldo general, los nombramientos aún requieren la aprobación de los legisladores europeos, excepto el de Costa, quien ya cuenta con el visto bueno de los dirigentes y asumirá su cargo hacia finales de año.

La ratificación de Von der Leyen y Kallas será observada de cerca en los próximos días, dado que ambos cargos son vitales para la dirección estratégica y diplomática de la UE.

Derecha europea acusa de “montaje” los nombramientos

La aprobación de estos nombramientos en la cumbre de Bruselas no sorprendió, ya que se esperaba tras el acuerdo alcanzado por los tres movimientos centristas del Parlamento Europeo esta semana.

Sin embargo, la reacción de los políticos de extrema derecha no se hizo esperar, calificando el proceso como un montaje.

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó su descontento por no haber sido incluida en las conversaciones preparatorias. Su grupo, los Conservadores y Reformistas Europeos, se consolidó como la tercera fuerza en las recientes elecciones al Parlamento Europeo.

Meloni votó en contra de Costa y Kallas, según fuentes cercanas a las conversaciones. En cuanto a Von der Leyen, Meloni se abstuvo, mostrando su descontento con el proceso. En una publicación en X, Meloni criticó la forma en que los partidos mayoritarios presentaron la terna, calificándola como “errónea en método y sustancia”.

En las elecciones celebradas del 6 al 9 de junio, la legislatura de la UE se inclinó hacia la derecha, afectando a los principales partidos gobernantes de Francia y Alemania. A pesar de ello, los tres grupos mayoritarios lograron mantener una mayoría de escaños.

Costa, ex primer ministro portugués, pertenece al grupo de centro-izquierda Socialistas y Demócratas. Kallas, primera ministra de Estonia, es parte del grupo liberal proempresarial, junto al presidente francés Emmanuel Macron, que sufrió una pérdida de escaños en las recientes elecciones.

Los nombramientos en altos cargos de la UE buscan un equilibrio geográfico e ideológico, aunque la última palabra la tienen los 27 mandatarios de los países miembros.

(Con información de The Associated Press)