Durante la jornada de ayer Jueves Santo, policías municipales de Progreso pidieron a los paseantes retirarse de zonas de playa por su seguridad, ante la constante llegada de visitantes a estos lugares durante este periodo de Semana Santa.

El director de la corporación, Emilio Raúl Caamal Gutiérrez, recordó que desde que se decretó el cierre del malecón en Progreso, los agentes bajo su mando, con apoyo de los estatales, han exhortado a la población a mantenerse alejada de las zonas de playa, e incluso los “invitan” a retirarse del lugar.

Sin embargo, una buena cantidad de familias hacen caso omiso de la recomendación y alejados de las zonas del malecón han llegado a las playas a pasar el día.

Explicó que el mandato estatal los limita a retirar a las personas del áreas de los malecones, pero no de otras playas.

Progreso a lo largo de este periodo de Semana Santa ha recibido una fuerte cantidad de paseantes, aunque la mayor parte de los mismos se han con-centrado en las comisarías costeras y no se desplazan hacia los malecones

En tanto, un gran número de vacacionistas arriba-ron a las playas de Celestún en la primera semana de vacaciones, ya que ahí no hay restricciones como en Progreso o Sisal; sin embargo, las autoridades vigilan que los porteños y turistas acaten las medidas sanitarias, aseguró el oficial mayor, Román Cauich Chacón.

Precisó que fueron cerca de ocho mil turistas, en su mayoría nacionales y de sitios aledaños, los que arribaron en el pasado fin de semana, que fue el primero de las actuales vacaciones; en los restaurantes se vio una buena afluencia.

“Nos dimos a la tarea como autoridad de estar atentos y vigilantes para que los habitantes del puerto y los turistas cumplieran con todas las medidas de higiene y seguridad, que portaran el cubrebocas, que los restaurantes sólo permitieran el 30 por ciento del aforo total”.

Destacó que no existen restricciones en el puerto, ni de movilidad, ni de ingreso de las personas al municipio, pero sí endurecieron las medidas sanitarias, con un trabajo conjunto con la Policía Municipal y otras instancias, con el objetivo de cuidar a los habitantes y a los visitantes.

“Exhortamos a los habitantes a que si no era necesario que no salieran de sus casas, para prevenir aglomeraciones; que dejaran que arribaran los vacacionista para que poco a poco se reactivara la economía del puerto, lo que es en beneficio de todas las familias, ya que el 50 por ciento de los 10 mil habitantes se dedican a la pesca, la principal actividad, y después le sigue el turismo”, comentó.

Policías vigilan la playa. (Foto: Novedades Yucatán)

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