MÉRIDA, Yucatán.- Trabajadores del Ayuntamiento de Tizimín “bañaron” con aceite quemado a una perrita, según ellos para curarla de la sarna que padecía, cuando en realidad el animalito no tenía esa enfermedad, sino que estaba bajo tratamiento por hongos.

El caso se dio en un barrio de esta ciudad, en donde esta perrita, tras las fuertes lluvias e inundaciones del año pasado, contrajo hongos, por lo que su dueña decidió llevarla al veterinario iniciando así un tratamiento para curarla.

Y todo iba bien aunque el can no tenía pelo, hasta que este día trabajadores de bacheo del Ayuntamiento de Tizimín pasaron por donde se encontraba, y al verla decidieron echarle aceite quemado, según ellos para curarla de la sarna.

Como era de esperarse, la acción enojó a la dueña, quien reclamó a los empleados municipales, pero el que hizo la acción la amenazó con hacerle daño si llamaba a la prensa o se quejaba.

Sin embargo, la propietaria de la perrita no se dejó intimidar y reportó los hechos por redes sociales, llegando la queja hacia la agrupación Bienestar Animal Tizimín, que a su vez se comunicaron con el titular de la Dirección de Servicios Públicos Municipales, Raúl Monforte Osorio, pidiendo su intervención en este claro caso de crueldad animal.

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