Martha Chan/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- La rehabilitación del arte sacro por parte de artesanos yucatecos, los cuales incluso han empleado pintura automotriz para su labor, ha ocasionado un severo daño a diversas imágenes religiosas, revelaron restauradores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Indicaron que esta labor requiere sumo cuidado y profesionalismo, pues las imágenes de santos o los retablos pertenecientes a templos católicos, algunos de los cuales datan de los siglos XVI, XVII y XVIII, tienen un gran valor patrimonial para Yucatán.

En entrevista, la coordinadora del área de Conservación y Restauración del INAH de la delegación Yucatán, Giovana Jaspersen García, explicó que el Estado tiene una gran riqueza en arte sacro.

Existen esculturas, pinturas al óleo y retablos, entre otras obras, que muchas veces no pueden ser restauradas, ya que en las poblaciones en las que se encuentran cumplen una función específica, sobre todo si la imagen pertenece al Santo Patrono de la población. 

Además de Giovana Jarpensen, otros restauradores que ofrecen sus servicios en el INAH son: Belén Medina Ramírez, Romina Quijano Quiñones, Affifa Cetina Beytía y Mario Pacheco Cornero.

Este grupo trabaja en proyectos como la reconstrucción de retablos que formaron parte de la Catedral luego de que fue saqueada; las piezas se encuentran en el Museo Regional de Antropología de Yucatán “Palacio Cantón”.

También participan en un trabajo en el convento de Sisal, en Valladolid, donde se descubrió una pintura antigua con detalles de flores, con una técnica especial a la que llaman “barroco-regional”. 

Este equipo de especialistas ha restaurado, desde 2012, unas 14 imágenes del acervo religioso de Yucatán, las cuales se encontraban en pésimo estado, ya que constantemente eran sacadas en procesión de los santuarios a los que pertenecen.

Explicó que en el Estado uno de los problemas más graves es el “intervencionismo” a las piezas sacras, ya que muchas de estas imágenes han sido repuestas por artesanos locales y no por expertos, es decir, “han sido matizadas hasta con pintura que se utilizan para los vehículos”.

Las labores de conservación para estabilizar estructuralmente las figuras incluyeron consolidación, unión de fragmentos y de ensambles, resanes e injertos, así como tratamientos para recuperar la integridad de la imagen.

La especialista manifestó que las imágenes pudieron ser rehabilitadas gracias al proyecto “Restaurando Yucatán”, del departamento de Patrimonio Cultural del Programa de Desarrollo Cultural Municipal, en el cual hubo un acuerdo con cinco alcaldes municipales, además del INAH, Conaculta, Sedeculta y la Arquidiócesis de Yucatán. 

Para el desarrollo total del proyecto se invirtieron 219 mil pesos, además generó empleos, ya que mediante la Sedesol se crearon 40 empleos para habitantes de distintas comunidades, entre ellas Chichimilá, Izamal, Motul, Sacalum y Tixcacalcupul.

Con radiografía

• Algunas imágenes religiosas restauradas fueron fabricadas con pastas de cola, carbonato de calcio y madera. También hay algunas que son articuladas, a las cuales se les sacaron radiografías para observar cómo fueron elaboradas en  su interior. 

Reviven obras religiosas

En 2012, las imágenes restauradas fueron:

• En Chichimilá
• Santo Sepulcro
• San Francisco
• Cristo Resucitado
• Nazareno
• San Pedro
• Cristo

En Izamal (capilla de los Remedios):

• Divino Rostro
• Virgen de los Remedios (Virgen, Niño y base)

En Motul

• Virgen del Carmen

En Sacalum

• Cristo (cruz y base)
• Cristo de las Ampollas (cruz y base)

En Tixcacalcupul

• Santo Sepulcro
• Santiago Apóstol
• San Juan Bautista

Para la realización del proyecto se contó con la colaboración de la Arquidiócesis de Yucatán, Escuela de Conservación y Restauración de Occidente de Guadalajara, Conaculta y Sedeculta.