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Un grupo de científicos de Bristol, Inglaterra, hizo un estudio experimental en el que trataron el alcoholismo crónico de varios pacientes, usando como medicamento el MDMA (3-4-metilendioxi-metanfetamina), droga usualmente conocida como éxtasis.

En el estudio participaron 11 personas y durante nueve meses de supervisión sólo un individuo volvió al consumo excesivo de alcohol, mientras cinco dejaron de beberlo por completo y otros cinco lo consumen de vez en cuando pero no tienen trastornos.

Además, los pacientes no presentaron ningún efecto secundario físico o psicológico.

Los científicos comprobaron en estos pacientes si pequeñas dosis de MDMA, junto con psicoterapia, los podría ayudar a curarse del alcoholismo, con más eficacia que los métodos convencionales. 

Según el psiquiatra Ben Sessa, que encabezó los experimentos, la mayor causa de la adicción al alcohol se esconde en un trauma subyacente que a menudo ocurrió en la infancia de la persona.

"La MDMA elimina selectivamente la respuesta del miedo. Permite recordar memorias dolorosas sin sentirse abrumado", aseveró Sessa a The Guardian. "Es la droga perfecta para la psicoterapia centrada en el trauma", añadió.

El tratamiento consistió en ocho semanas de terapia, con administración de dosis fuertes de la droga en la tercera y sexta semanas.

Después de las sesiones con MDMA, los especialistas monitorearon a los participantes durante la noche y los llamaron por teléfono a lo largo de toda la semana para recabar datos sobre la calidad de su sueño, el estado de ánimo y el riesgo de suicidio.

Los datos no arrojaron evidencia de síntomas de abstinencia de drogas.

Ahora, según los científicos, se necesita más investigación, a fin de comparar los resultados con un grupo que reciba un placebo en lugar de MDMA y así comprobar la efectividad del tratamiento.

(Con información de actualidad.rt.com)