Patricia Itzá/SIPSE

MÉRIDA, Yuc.- Una ola de robos debido a la poca vigilancia que existe en el mercado “San Benito” es lo que denuncian locatarios de ese lugar, por lo que de nueva cuenta solicitan la instalación de una caseta de policía con el fin de reforzar la seguridad.

El presidente de la coalición de los líderes de los mercados, Pedro Chiquini Cutz, en conjunto con varios propietarios de locales, exigieron mayor seguridad en ese centro de abasto que alberga más de 2 mil 500 espacios que en su mayoría son ocupados como bodegas.

Relataron que desde inicios de año hasta estas fechas se han realizado tres robos en donde lo sustraído va desde los 40 mil hasta 130 mil pesos, al ser toda la mercancía que ofertarían los propietarios por varios meses.

De las tres personas afectadas, dos nada más han interpuesto su demanda ante la Fiscalía General del Estado, debido a que un afectado insistió “que no se solucionará nada y los ladrones continuarán realizando sus fechorías”.

Jorge Francisco Braga, presidente de la coalición de comerciantes en general, señaló que existen ocho bandas que andan en los alrededores e incluso trabajan dentro del mercado y sospechan que son ellos los que han realizado los robos, sin embargo, aseguran “que no se pueden quedar a dormir a cuidar sus pertenencias”.

No les cumplen

Dijeron que el proyecto de colocar casetas de policías en el lugar solo ha quedado en el dicho de varias administraciones municipales debido que hasta ahora esto no se ha concretado. Solo cuentan con vigilancia privada la cual “les quita la responsabilidad a la policía municipal y tampoco es suficiente”.

“En el mercado tenemos el servicio de vigilancia privada, que es pagada por el Ayuntamiento de Mérida, en donde nos han dicho que son 20 personas encargadas de la seguridad, sin embargo en el turno de la noche cada vez vemos menos”, expresó.

Salieron regañados

Esta situación ha llegado a las oficinas de la Subdirección de Mercados, encabezada por Jorge Antonio Jorge. Según los afectados, cuando ellos presentaron su queja ante los robos el funcionario solamente les habría respondido: “no se quejen porque se los pueden quitar (los puestos)”.