William Sierra/Milenio Novedades
MÉRIDA, YUC.- Cuando uno se siente solitario, triste, o pasando por un difícil momento, siempre debemos recordar que los ángeles nos acompañan, que están con nosotros para ayudarnos, por muy difícil que sea el momento por el que estemos pasando, expresó la angeloterapeuta Aracely Ibarra Juárez, durante el programa radiofónico Salvemos una Vida, que se transmite por Amor 100.1 FM de Grupo Sipse, todos los viernes de 11:00 a 12:00 horas.

“Los ángeles nos dicen algo importante: no estás solo, están ellos con nosotros, te apoyamos, amamos, te guiamos por este camino en el que, por muy oscuro que te parezca, al final vas a encontrar ese paraíso que buscas”, expresó la invitada del programa, conducido por Esperanza Nieto y Jorge Barrera.

Indicó que constantemente los ángeles la acompañan, le dan mensajes de amor, incluso hace como una semana le dieron una nueva encomienda, a la que le sugirieron llamara “La dieta del amor”, cuyos mensajes e ideas debía compartir a través de las redes sociales.

Abundó que “La dieta del amor” tiene como duración todo el mes de agosto, comenzando desde el primer día y compartiéndola diario en la página de Facebook “Lluvia de ángeles”, Angeloterapeuta Aracely Ibarra Juárez. “Ahí, todos los días habrá meditaciones, canalizaciones, y videos. Los ángeles van indicando qué se irá subiendo”, señaló.

“Siempre habrá algo bueno para cada uno de nosotros. Nos estarán llegando mensajes de lo que necesitamos en ese momento”, acotó Esperanza Nieto.

Tras mencionar que siempre ha estado acompañada del Arcángel Chamuel, que es el del amor incondicional, la invitada señaló que siempre estamos sufriendo, preocupados por buscar el amor externo, cuando ya tenemos adentro ese que nos da Dios, que nos protege y guía.

“A veces estamos más preocupados en cosas materiales y nos olvidamos del amor interno, de nuestro corazón, de esa luz que tenemos y que nos envía Dios”, dijo.

La terapeuta en Sanación Angelical añadió que estamos conectados al cielo, Dios nos envía siempre una luz que nos entra por la coronilla y se queda en el corazón, pero los seres humanos estamos más preocupados, por ejemplo, en encontrar una pareja, tener hijos, obtener cosas que no nutren el alma.

“Se nos olvida que nuestro corazón está lleno del amor de Dios. Cuando uno lo siente, jamás te vuelves a sentir solo. Seguimos sin entender que no hay que buscar en nuestra pareja, amigos o hijos la aceptación, ya venimos al plano terrenal siendo seres completos y a compartir nuestra vida con quienes nos rodean”, abundó y añadió que “los ángeles nos quieren hacer entender eso durante este mes de agosto”.

La conductora Esperanza Nieto recordó que hace muchos años una persona muy sabia le dijo que en la vida lo que realmente cuenta es cuánto amor diste y cuánto no ofreciste, pues al final eso es lo que se nos va a tomar en cuenta. Precisamente en esa búsqueda hacia fuera no damos, incluso ni a nosotros mismos, hay que quitarse esa venda para darse cuenta que uno tiene todo para vivir bien y feliz, pues Dios nos da todo.

Cuando se le preguntó a Aracely qué sucede cuando se tiene alguien cerca y no se da cuenta de ese amor que Dios le dio, incluso en la vida diaria se observa que unos son más optimistas y otros pesimistas, respondió:

“Nada, porque todos tenemos libre albedrío, a menos que esa persona pida ayuda. Está viviendo un proceso. Recordemos que para que amanezca debe anochecer, y los seres humanos somos así. Cuando regresamos a la luz, después de haber vivido la oscuridad, la valoramos. Lo que podemos hacer es orar, pedir a los ángeles guardianes de la persona por la que estamos intercediendo que la llenen de sabiduría y amor divino”, expresó.

También subrayó que uno es autosuficiente para darse amor, para ello basta con cerrar los ojos, inhalan, exhalar y abrazarse. “Hay pacientes que han hecho este ejercicio y acaban con lágrimas al sentir ese amor. Dios y los ángeles los están abrazando”, dijo.

Dejó en claro que nadie debería sentirse estar solo, incluso hay personas que pueden estar rodeados de gente sintiendo ese sentimiento, por lo que insistió en que autoabrazarse es una sensación hermosa, en la que se siente esa vibra de la divinidad, y al experimentarse ya no se busca tanto en lo externo.

“Somos autosuficientes, hay que amarse uno mismo, alimentarse correctamente física y espiritualmente. Hay que entender que somos seres individuales”, añadió y los conductores coincidieron en que es importante amarse a uno mismo.

Aracely Ibarra indicó que a lo largo de su vida ha recibido muchas señales, tanto de niña como de adulta, estando protegida por los ángeles. Una de esas veces fue cuando se dirigía a Pachuca con su esposo, al que remplazó al volante. En un tramo a la altura de Villahermosa, Tabasco, se durmió y sintió que alguien la tocó para que despertara. Pensó que fue su marido, pero al mirarlo estaba profundamente dormido.

“Antes del viaje le pedí a San Miguel Arcángel que nos protegiera y así sucedió. Solo agradecí mucho”, comentó y recordó que, en ese entonces no era angeloterapeuta. “A veces, la gente no cree muchos en estos temas”, lamenta.

Esperanza también compartió un momento similar cuando en una ocasión acudió con su esposo a una librería y al pasar por un pasillo se cayó un libro que se encontraba arriba. Lo colocó en su lugar, y dos veces lo mismo ocurrió, la última, sobre su cabeza; se trataba de un libro de oraciones que estaba en un sitio para novelas. Comprendió la señal, que ese libro era para ella, y le ha ayudado bastante.

Una de las preguntas que muchos se hacen es, cómo captar cuando los ángeles nos envían un mensaje, a lo que dijo que es necesario estar en un estado de armonía, de paz y meditación. “Los ángeles saben nuestras necesidades, pero no intervienen a menos que se lo pidamos, de corazón, creyendo en ellos”, dijo.

En un momento del programa, Aracely Ibarra le dijo a Jorge Barrera que es una persona protegida por los ángeles, que disfruta de la familia, la naturaleza, de dar detalles, de ayudar, tras lo cual el conductor asentó que es verdad, pues ha estado tres veces al borde de la muerte... y aquí sigue.