Merma en mercancía perecedera y quema de equipos son problemas a los que se enfrentan los comerciantes en pequeño, resultado de los dos apagones que han afectado a la ciudad en lo que va del año, manifestó el presidente de la Cámara de Comercio en Pequeño, Jorge Cardeña Licona, quien afirmó han buscado acercamiento con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que apoye de alguna manera a quienes han resultado con sus equipos dañados a causa de estas fallas.

Señaló que el aumento de precio de productos de la canasta básica también mantiene en jaque a este sector comercial que vislumbra un difícil panorama de ventas pues tan sólo el café incrementó en un 35 y 40% su precio, por lo que los sobrecitos de café de 8 y 14 pesos, ahora costarán entre 13 y 25 pesos, y los pomos de este producto que costaban entre 25 y 30 pesos elevaran su costa hasta arriba de los 50 pesos.

La escalada de precios de productos impacta directamente en la ganancia de los comerciantes y aunado a los altos cobros por la tarifa comercial de la luz eléctrica a la que se enfrentan, los deja en un difícil panorama.

Aumento de precios en negocios de Yucatán 

Propietarios de algunas loncherías del centro, como las ubicadas sobre la calle 64 entre 61 y 59, opinan que estos aumentos los obligan a elevar sus precios aunque sea unos pesos, pues les resulta imposible absorberlos sin cobrarlos al cliente, pues entre el pago de impuestos al Servicio de Administración Tributaria, la CFE, además de los cobros del Ayuntamiento, sus ganancias se ven reducidas al límite.

Los dueños de una cafetería establecida sobre la calle 62 entre 57 y 55 señalaron que tendrán que incrementar el costo de las variedades de café que ofrece, ante el aumento de precio de este producto.

Su administrador general, Ramón Lugo, señaló que el costo por reabastecerse de café ha subido hasta en un 30% en comparación con meses anteriores y ante el aumento imparable de insumos como el aceite, el azúcar y la harina, que son básicos para elaborar los platillos que ofrecen, se ven obligados a incrementar el costo de ciertos alimentos y bebidas de su menú.

Dijo que aunque algunos clientes comprenden el incremento en los precios, a otros les causa cierto disgusto, pero sus ganancias están severamente castigadas y tienen que sacar la nómina de sus empleados y de alguna manera mantener a flote sus negocios.