Aumentan número de vendedoras ambulantes por vacaciones
Ambulantes, asunto que no se puede frenar: “Son como células que en un minuto se multiplican”, aseguran.
Patricia Itzá/SIPSE
Mérida, Yuc.- Durante esta temporada vacacional, la Subdirección de Mercados del Ayuntamiento de Mérida informó que mujeres conocidas como “chiapanecas” aumentan su presencia en el Centro Histórico de la ciudad, lo que motiva también una mayor vigilancia para que no sean “molestas” para el turista, al ser éste su principal mercado, que de igual manera acrecienta estos días.
El titular de la dependencia municipal, Jorge Antonio Jorge, indicó que el único sector del comercio informal que tiene un incremento en esta temporada vacacional es el de personas provenientes de otros estados que venden prendas de vestir, porque el resto del ambulantaje se traslada a zonas veraniegas.
“Este problema se da (el de vendedoras de ropa) porque la única injerencia que tenemos como Ayuntamiento es el de desplazarlas a otros lados, ya que nuestra competencia no nos permite retenerlas o detenerlas”, aclaró.
En este sentido señaló que el ambulantaje es un tema que no se puede detener debido a que “es como células que en un minuto se multiplican”, por lo que la tarea municipal ha sido “ajustar, quitar y cambiar” todo con el fin de que no crezca el número, por lo que según dijo de las más de mil personas que se dedicaban al comercio informal cuando se inicio la administración, hasta el momento hay registro de alrededor de 450.
Antonio Jorge refirió que en la calle 54 no hay ambulantes “por lo que está completamente liberada la calle” además de que los vendedores de comida ya cuenta con un horario que es de 9 y 4 de la tarde, esto con el fin de que no se consideren una competencia desleal para los negocios ya establecidos.
Sin embargo, a pesar de lo dicho por el subdirector, a los alrededores del mercado municipal y calles aledañas al Centro Histórico hay vendedores ambulantes que representan un obstáculo para los peatones, lo que obliga en muchas ocasiones a que las personas caminen bajo las aceras, poniendo en riesgo sus vidas.