MÉRIDA, Yucatán.- Las prendas yucatecas, con bordados tradicionales mayas que se realizan en distintas comunidades del interior del Estado, están de moda en algunas partes del mundo, debido a que son consideradas piezas de arte, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), delegación Yucatán, Fernando Muñoz Carrillo.

Por tal motivo, el empresario consideró importante que la sociedad, sobre todo la yucateca, revalore el trabajo artesanal que realizan a mano cientos de mujeres que dedican algunos días, meses o años en la elaboración de ropa típica o hipiles.

“Hemos identificado algunos lugares en municipios en los que se dedican a los bordados, uno de ellos es Kimbilá, que es de los más importantes de la industria del bordado y nosotros apoyamos el tema, ya que las prendas yucatecas están de moda y gustan mucho al turismo, por lo que promovemos que haya cada vez más manos artesanas que borden”, explicó.

Precisó que la Canaive trabaja con al menos 20 productores de bordado yucateco que elaboran piezas típicas de la región para su comercialización, lo que también contribuye a la economía de las familias y a tener un trabajo seguro.

A pesar de que el trabajo hecho a mano es por excelencia el mejor, en la actualidad han incursionado en el realizado a máquina, debido a que representa menor tiempo de confección y costos, lo que a su vez redunda en piezas de precios más accesibles.

“Un terno yucateco con las técnicas artesanales puede durar hasta un mes su confección, y esa prenda costaría muchísimo dinero y eso muchas veces no se paga en México; en cambio en Europa, como es considerada una obra de arte, pagarían por ella 10 veces más de lo que cuesta”, aseguró Muñoz Carrillo.

Lamentó que las piezas aún no sean consideradas por su valor real, pues los ciudadanos locales lo ven como algo normal, a diferencia de los extranjeros, que no encuentran en sus países prendas de ese estilo ni el tipo de bordado.

Agregó que con el “boom” de la guayabera como prenda típica también se popularizaron los bordados en ellas, pero a máquina, debido al número que se realizan.