Martha Chan/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- La palabra bullying se encuentra de moda, pero representa una serie de problemas sistemáticos contra menores de edad, al grado que el Gobierno Federal alista acciones para prevenir el acoso escolar.

Aunque en Yucatán existe la Ley para la Prevención, Combate y Erradicación de la Violencia en el Entorno Escolar del Estado de Yucatán, aún no se ejecuta y los infantes no se libran de agresiones en los planteles educativos.

El reglamento se aprobó desde 2012, y de acuerdo con sus lineamientos deben aplicar sanciones o medidas correctivas a los infantes que realicen bullying a sus compañeros, los maestros, prefectos e intendentes, entre otros involucrados en el tema.

En la ley se establece la creación del Consejo para la Prevención, Tratamiento y Erradicación de la Violencia en el Entorno Escolar, que será el órgano especializado de consulta, análisis y evaluación de los programas y acciones que se tomen para hacer frente al problema.

Ese consejo debe estar presidido por el jefe del Ejecutivo, entre diversas autoridades estatales y municipales.

De acuerdo con el juez del Centro de Justicia Oral de Mérida, Luis Armando de Jesús Mendoza Casanova, esa disposición pretende erradicar la violencia entre alumnos y puede ser combatida desde el hogar.

Señaló que la ley garantiza la paz y la armonía en la convivencia de alumnos y se proponen programas. 

La disposición establece que es para estudiantes de las escuelas, las cuales deberán instituir “mediadores escolares”, gente capacitada para resolver conflictos entre alumnos.

Además, deberá haber prevención y programas específicos que involucren a padres de familia y se establecerá el Modelo Único de Atención Integral que cita la ley respectiva para combatir el acoso escolar.

La Secretaría de Educación Estatal (SEE) está obligada a implementar programas y acciones que tiendan a la prevención de la violencia en el entorno escolar y establecer un área especializada para atender estos casos.

No obstante, a la fecha no se han realizado medidas ni mucho menos ha sesionado el consejo.
Eso sí, se informó que la SEE, desde 2008, tiene un programa para apoyar a los estudiantes que sufren acoso escolar, pero se carece de cifras de los casos presentados en la entidad.

Se indicó que la rebeldía de estudiantes viene de sus hogares, lo que ha ocasionado el acoso escolar sistemático a niños y jóvenes y ponga en alerta a las autoridades estatales y municipales.

En ese tenor, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey), que preside Jorge Victoria Maldonado, en 2013 registró 14 casos de bullying, y este 2014 ya hay cuatro casos registrados, dos en colegios privados y otro tanto en públicos.

De los 14 casos, 10 llegaron a un arreglo, y en los de 2014, tres; el resto se encuentra en un proceso en vía de conciliación.

En tanto, la Policía Municipal de Mérida (PMM), a través de sus programas DARE y Tú decides, registra este año tres casos, uno de ellos muy grave, pues el menor intentó ahorcar a su compañero. Se desconoce si alguno de esos casos tienen relación con los de la Codhey.

Victoria Maldonado informó que para el siguiente ciclo escolar, 2014-2015, habrá un programa intensivo de capacitación y sensibilización en las escuelas particulares, pues hay una cifra negra del bullying en el Estado.

Recalcó que hay que fomentar la cultura de la denuncia y es importante estar alerta a cualquier signo de cambio de conducta en los menores que puedan ser detectados por los docentes y papás. 

Agresión extrema en las aulas

La Policía Municipal de Mérida (PMM) y el Instituto Municipal de la Juventud (IMJ), a través de sus programas, combaten los casos de bullying en las escuelas, en especial en el sector sur de la capital yucateca.

En entrevista, el director de la PMM, Mario Arturo Romero Escalante, reveló que los casos de agresión entre alumnos han llegado a la violencia extrema, incluso en una ocasión se canalizó a un menor con el psicólogo, ya que intentó ahorcar a un compañero, el cual no era la primera vez que había sido agredido.

Resaltó que el menor agresor ya había sido reportado como “problemático”, por esta situación es importante mantener comunicación con los maestros y padres de familia, para canalizar los casos a las instancias correspondientes.

Agregó que a través del programa de DARE (Drugs Abuse Resistence Education) se han detectado este año tres casos de acoso escolar, dos en escuelas del centro, y uno en el sur. Se desconoce si alguno tiene relación con los registrados por la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey).

Expresó que el programa DARE les ha dado buenos resultados, incluso los menores tienen más confianza para exponer sus problemas y muchas veces piden hablar con algún agente.

Primer lugar

• La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que el bullying no está tipificado como delito en el Código Penal de Yucatán. Ese tipo de casos se denuncian ante el Ministerio Público como delitos de amenazas, agresión o lesiones.
• En el próximo ciclo escolar la Codhey iniciará en los centros escolares particulares, sobre todo en las preparatorias, campañas de prevención que involucren de manera activa a los estudiantes, maestros y padres de familia.
• A nivel nacional, se estima que cuatro de cada 10 estudiantes de primaria y secundaria sufren acoso escolar, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y coloca al país como el primer lugar por la incidencia del bullying a nivel internacional.

Máscaras de crueldad

La Secretaría de Educación Pública (SEP) anunció 15 acciones contra el acoso escolar o bullying, reflejo de crueldad en las escuelas; entre los pasos a seguir se encuentra crear una instancia oficial en cada Estado para atender casos, así como campañas permanentes contra la violencia en los planteles.

• 1.- Fortalecer los mecanismos de alerta temprana para identificar oportunamente las manifestaciones de violencia escolar, conocer sus causas, alcances y consecuencias, así como diseñar las estrategias para contribuir a su prevención y contención.
• 2.-Incorporar en las páginas electrónicas institucionales vínculos para la recepción y canalización de las denuncias.
• 3.-Fomentar la creación de redes de colaboración interinstitucionales para coadyuvar en la prevención y atención de la violencia escolar.
• 4.- Desarrollar protocolos de actuación para directores, maestros, alumnos y para auxiliar a los padres de familia con el propósito de prevenir, y en su caso, encauzar adecuadamente situaciones de violencia en el entorno escolar y propiciar que se proporcione de inmediato el apoyo que se requiera.
• 5.- Enriquecer las currículas de la educación básica, media superior y de formación de maestros con instrumentos que permitan la prevención y atención de casos de violencia escolar.
• 6.- Organizar foros de consulta sobre temas relacionados con la violencia escolar.
• 7.- Reforzar en las estrategias de gestión y organización escolar la promoción y la supervisión cotidiana del ejercicio y protección de los derechos humanos, la vida democrática y el aprecio a la diversidad, como elementos de la convivencia escolar, de manera que en todo momento quede asegurado el respeto por el principio del interés superior de la infancia.
• 8.- Proveer los materiales para fortalecer las labores de los consejos técnicos escolares para que en junio la discusión se concentre en los temas de la mejora del ambiente escolar y propicie la realización de talleres con el mismo tema para padres de familia.
• 9.- Establecer en la entidad federativa una instancia oficial, dependiente de la autoridad educativa local, para la atención de casos de violencia escolar.
• 10.- Reconocer y fortalecer la función de maestros y directivos dotándolos de las herramientas que les permitan la comprensión de la cultura infantil y juvenil, el fomento de una cultura de inclusión, paz y tolerancia, así como el establecimiento de relaciones sustentadas en el respeto mutuo y la resolución de los conflictos en un marco de sana convivencia.
• 11.- Incorporar en los programas de “escuelas para padres de familia” los elementos que permitan dar atención a la violencia en el entorno escolar y en el seno familiar.
• 12.- Promover que los consejos nacional, estatal, los municipales y escolares de participación social en la educación, realicen actividades para la prevención y atención de la violencia.
• 13.- Impulsar la participación de los padres de familia y otros actores sociales en la vida cotidiana de los planteles para desarrollar una comunicación continua y efectiva que propicie la prevención y atención de la violencia escolar y acompañen las trayectorias educativas de los alumnos.
• 14.- Desarrollar campañas sistemáticas y permanentes de comunicación social para difundir las acciones emprendidas para la prevención de la violencia escolar, y de los medios de que se dispone para recibir asesoría o formular denuncias.
• 15.- Elaborar estudios a nivel nacional, estatal y regional respecto del problema de la violencia escolar; identificar las escuelas con mayor incidencia de problemas, a efecto de contar con elementos que permitan diseñar un mapa e implementar soluciones, así como concientizar a padres, alumnos y maestros.