La destrucción de los hábitats es uno de los problemas más evidentes en el sistema ambiental, no obstante que muchos de esos espacios de vida ayudan a nivelar los excesos de contaminación que se están presentando y mejorar el medio en que se desenvuelven los seres vivos. Uno de estos hábitats es el que alberga a las grandes aves de rapiña, que ayudan a eliminar la contaminación, ya que se encargan de comer los cuerpos de los animales que han fallecido evitando así una plaga que pudiera ser la más grande que asuele al planeta tierra.

En este momento su mayor riesgo se deriva del uso inadecuado de los recursos y por ello es importante que las personas sean conscientes de su responsabilidad antes de utilizar recursos del planeta. Quizá para muchos esto no sea importante ya que piensan que esos recursos son inagotables, lo cual es erróneo.

Los científicos alertan desde hace años respecto del aumento de las especies en peligro de extinción y la pérdida de la biodiversidad. Los estudiosos aseguran que “somos testigos de una sexta extinción impulsada por los seres humanos”. La pérdida de biodiversidad no solo causa daños en el medio ambiente, sino en la economía, tal como se ha demostrado desde hace mucho tiempo y se ha presentado en numerosos estudios.

Hay que reconocer que muchas veces lo que presentamos como problemas son las consecuencias visibles de la gestión ambiental que se está realizando. El verdadero problema es la mala gestión, la corrupción a distintos niveles que impide que la ley se aplique con contundencia y la explotación no sostenible de los recursos naturales.

Todo ello es parte de las consecuencias derivadas de la omisión que muchas veces hace la autoridad en relación con el cumplimiento de los requisitos ambientales en la realización de proyectos, cuyos resultados van de la mano con el desinterés que numerosas personas tienen sobre los temas ambientales. Lamentablemente y utilizando la ley del menor esfuerzo, se permite que la autoridad, al no ser cuestionada por su ineficacia, sea más condescendiente y solape verdaderos daños a la naturaleza.

El medio ambiente se encuentra en peligro por diversas amenazas que ponen en peligro no solo a los ecosistemas sino a todos los seres humanos. Conocer los problemas ambientales es el primer paso para concienciarnos de su importancia y reclamar y participar en acciones para la protección y recuperación de la naturaleza.

No debemos olvidar que la mayoría de los problemas ambientales derivan de la acción no planificada del hombre, cuyo crecimiento mundial urbano demanda cada vez más recursos naturales de todo tipo: hídricos, energéticos, terrestres, orgánicos y minerales.

Los problemas ambientales suelen pasar inadvertidos hasta que sus consecuencias se hacen muy evidentes a través de los desastres naturales, tragedias ecológicas, amenazas globales o riesgos muy severos para la salud de los seres humanos.