Pendiente de las necesidades de sus agremiados, Alfonso Cepeda Salas, secretario general del SNTE, anunció en días pasados que ya tiene listo el Pliego Nacional de Demandas de este año que próximamente será entregado a la nueva secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez Álvarez. Dicho documento fue aprobado por todas las secciones estatales y la dirigencia nacional que integran los órganos de gobierno del sindicato. Las demandas fueron tomadas de la tercera consulta para la construcción del Pliego Nacional de Demandas, en la que participaron más de un millón de maestros, destacando entre ellas el incremento salarial, la revisión de las condiciones laborales en tiempo de pandemia, las prestaciones económicas, profesionales y sociales, añadiéndose por primera vez la regulación del teletrabajo y una canasta básica tecnológica para apoyar el trabajo docente a distancia.

Una de las principales demandas fue la basificación de trabajadores en todos los niveles educativos y la regulación y compactación de plazas que por las condiciones de la emergencia sanitaria no se están respetando, de igual forma se hace necesario considerar la descarga administrativa, la regulación del teletrabajo, la canasta básica tecnológica, la reforma a la Ley General del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros, y, en el caso de Yucatán, establecer un programa de estímulos para el personal de apoyo y asistencia a la educación que funciona en otros estados del país. Otra demanda importante fue referente a la seguridad social y atención médica y hospitalaria en los casos donde los docentes contraigan Covid ante las presiones administrativas de regresar a clases presenciales este mismo año. En este aspecto ya se puso en marcha la Segunda Consulta Nacional sobre Seguridad Social, que se aplica de manera virtual y presencial en todo el país y cuyos resultados serán entregados al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado.

Un avance muy importante se dio en el programa de carrera para los maestros que otorga incentivos al mejor desempeño de profesores, asesores técnico pedagógicos, técnicos docentes, directivos y supervisores, así como contribuir a su formación continua y superación profesional, todo ello sin cambio de función y con la participación voluntaria. En el caso de quienes tengan estímulos de los programas anteriores, también podrán inscribirse conservando sus derechos adquiridos; para integrarse a este nuevo sistema es necesario contar con dos años de servicio en una plaza con nombramiento definitivo y los que se desempeñan en plazas por hora, semana, mes, necesitan tener un nombramiento de base de 12 horas como mínimo impartiendo una asignatura o bien asignaturas afines. Serán 8 los niveles del programa en donde en las escuelas ubicadas en zonas de alta pobreza o de marginación el despegue salarial del primer nivel será del 41%, en tanto que en el resto del sistema será del 35% y así en los sucesivos niveles.