Resiste la unión de América Latina y el Caribe
Cesia S. Rodríguez Medina: Resiste la unión de América Latina y el Caribe
En medio de la crisis post-pandemia que asola al mundo y ante la dificultad de recuperar la estabilidad económica y social, es de reconocer el acierto del presidente Andrés Manuel López Obrador por convocar de forma presencial a la VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), unión que ha prevalecido luego de 10 años de haberse creado con el único fin de fortalecer los lazos de cooperación para el desarrollo y bienestar de los pueblos de América Latina y el Caribe. Luego de 4 años sin reuniones los 33 países miembros se dispusieron a dialogar sobre la agenda de trabajo 2021, en donde se destacaron los aspectos relacionados con la estrategia sanitaria referente al proceso de vacunación, el programa de recuperación económica y los acuerdos para la cooperación aeroespacial sin dejar a un lado los mecanismos para contrarrestar el cambio climático.
El encuentro no estuvo desprovisto de sinsabores, es de saber que los gobiernos actuales de Uruguay y Paraguay aliados de Estados Unidos se manifestaron equívocamente para deslegitimar al presidente Nicolás Maduro y falazmente declararla ausencia de democracia y libertades en países como Venezuela, Cuba y Nicaragua, y entre sus incongruencias demandaron por la autodeterminación de los pueblos y la no injerencia, claramente cínicas por el silencio manifestado ante las intervenciones de EUA en Bolivia y Venezuela, de igual forma se expresaron contra el bloqueo económico y financiero a la Isla de Cuba, pero sí una abierta apología a la Unión Europea como modelo de colaboración económica y a la OEA como alternancia integradora de América.
En respuesta a estas declaraciones, el Presidente venezolano expuso puntualmente los antecedentes que dieron origen a la Celac, en donde sin duda en su conformación la diversidad ideológica no fue obstáculo para la integración y su continuidad hasta hoy, por esa razón declaró lamentable que Brasil haya abandonado su participación desde el año pasado, por otro lado, invitó al Presidente paraguayo a debatir sobre democracia, de libertades y de resistencias agregando que debe cesar el divisionismo que se ha inmiscuido en Latinoamérica por gobiernos conservadores, defendiendo que debe imperar en las políticas internacionales el servicio al derecho internacional en beneficio de la humanidad.
A pesar de la inconformidad de algunos gobiernos claramente monroístas, los trabajos de la Cumbre demuestran un interés general por la ayuda y la cooperación mutua, simbiosis que se ha reflejado durante la pandemia de Covid-19, como en las actividades llevadas a cabo por la brigada de médicos cubanos que no dudaron en auxiliar a países de América y Europa, o como recientemente lo hizo México al donar vacunas e insumos médicos a Guatemala, El Salvador y Honduras, por esta y otras razones refrendar el compromiso de los integrantes coadyuvaría a enlazar mayores beneficios para la región a través del establecimiento de políticas que respalden a las comunidades más vulnerables, procurando la defensa a una vida digna, de paz y prosperidad de tal manera que podamos insertar lo que llamaría José Martí: “la semilla de una América nueva”.