|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo, hoy todavía, plantaría un árbol.- Martin Luther King

Hace ya unos días, debo confesar, olvidé los audífonos en casa y era día de utilizar el transporte público, motivo que me llevó a escuchar una de esas pláticas que a veces son bastante interesantes; sin embargo, en esta ocasión me topé con las palabras de una mujer que decía lo siguiente: “No sé por qué todos los jóvenes se han traumado con todo eso de salvar al mundo; la verdad, es un tanto fastidioso”.

Las palabras que conformaron el discurso de aquella mujer me parecieron tan absurdas como interesantes, cómo el salvar al mundo es visto como una moda, no como una necesidad. Y aquellos que han decidido tratar de hacer conciencia en los demás son vistos como excéntricos, son criticados en redes sociales e insultados por atreverse en el medio de la ciudad a pedir un poco de cuidado y amor a nuestro hogar, porque debemos entender que todo esto que nos rodea es lo que nos ha permitido un crecimiento como sociedad, pero, sobre todo, como seres humanos.

Mi generación ha heredado un mundo lleno de males, lleno de especies en peligro de extinción, lleno de catástrofes naturales y temperaturas tan elevadas que han terminado por dañar a seres humanos y animales, pero parece que a muchos no les importa. Muchos parecen pensar en que nuestro paso por la tierra es solamente el tiempo que este lugar existirá y lo que pase con él no importa tanto. Muchos piensan que las ganas de salvar al mundo se deben quedar en eso, en solamente tener ganas, pero no hacer nada para lograrlo. Que se debe quedar así porque de esa manera evitarán que unos cuantos les pidan apagar la luz cuando no sea necesario usarla o cerrar la llave del agua cuando no se esté utilizando.

Debemos entender que querer cambiar al mundo va mucho más allá de poner nuestro granito de arena, porque sí, toda ayuda, por más pequeña que sea, marca una diferencia, pero siempre es necesario dar un poco (o mucho) más de lo que es necesario. Debemos entender que salvar lo que hoy tenemos es tarea de todos los que estamos y los que estarán aquí, debemos entender que nuestro planeta está pidiendo ayuda, y que muchas veces parecemos no escuchar.

Hoy estamos celebrando el Día Internacional de la Madre Tierra, y qué mejor ocasión para hablar de un tema tan necesario y “tan a la moda”; hoy, en el “cumpleaños del planeta”, quizá veas por ahí un grupo de personas invitando a hacer de éste un mejor lugar, a darnos una nueva oportunidad para saber apreciar todo lo que él nos da. Si ves a grupo de personas en esas tareas no pienses en que sus acciones son una moda absurda, porque la verdad es que nunca una moda había sido tan necesaria.

Lo más leído

skeleton





skeleton