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La semana que acaba de terminar trajo consigo Proyecto Power, la nueva película de la plataforma Netflix. Este título llega para demostrarnos una vez más que las películas de superhéroes se han apoderado de la pantalla.

Este film tiene como directores a Henry Joost y Ariel Schumman, en la parte de guionismo tenemos a Mattson Tomlin. La película tiene un punto adicional y lo son las actuaciones de Jamie Foxx y Joseph Gordon-Levitt como protagonistas; sin embargo, lo que verdaderamente llama la atención de “Proyecto Power” es que se desvía del camino al que nos tienen acostumbrados en el cine de superhéroes para plantear la existencia de una droga que te permite obtener poderes especiales, pero solamente durante cinco minutos.

Este largometraje nos cuenta una historia que se desarrolla en las calles de Nueva Orleans, en donde se empieza a correr la voz sobre una misteriosa nueva píldora que desbloquea superpoderes únicos para cada persona que la ingiera. Sin embargo, aunque sé que suena maravilloso, también debo adelantarles que todo esto tiene una trampa, ya que no sabes cómo te afectará hasta que la tomes.

Algunos desarrollan una piel a prueba de balas, invisibilidad y una fuerza sobrenatural, pero otros por su parte serán acreedores de una reacción mortal. Sin embargo, aunque la píldora suena como un verdadero tesoro, cuando eleva el crimen dentro de la ciudad a niveles peligrosos, un policía (Joseph Gordon-Levitt) opta por unirse a un equipo, conformado por un traficante adolescente (Dominique Fishback) y un ex soldado que tiene una venganza secreta por cobrar (Jamie Foxx) para luchar contra el poder y arriesgarse a tomar la píldora con el fin de localizar y detener al grupo que ha sido responsable de su creación.

La sinopsis de la película nos hace pensar que puede traspasar las fronteras de lo que la plataforma nos ha ofrecido durante estos últimos meses; sin embargo, no lo logra. Los temas que nos presenta desde la primera instancia no logra abordarlos de una forma correcta durante todo la película.

Y aunque los directores tratan de hacer que el espectador llegue de forma fácil a la meta, también hacen que nos topemos con varias escenas que parecen incompletas. Debo decir que los directores realizaron lo que les permitió el material que tuvieron a su alcance, pero se quedan a medio camino.

La única forma en que debes darle una oportunidad de verla es si estás buscando con que pasar el rato.

Calificación: dos estrellas y media

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