El libro digital “Cartel político secuestró a Morena” me lo envió un militante, el reconocido escritor maya Santiago Domínguez Aké, donde el periodista Roberto López Méndez analiza escrupulosamente información de primeras fuentes en Yucatán para evidenciar el caso de la corrupción de este movimiento político, que hizo a un lado a los genuinos morenistas para incluir a “dinosaurios políticos”.

Para quienes desde otros partidos de “derecha”, pro-empresariales, Morena significa “más de lo mismo”, olvidan algo importante: en su conformación, “con tal de enviar al PRI al basurero de la historia”, se aceptó alianzas con “tirios y troyanos”, por lo que, sobre todo en sus “cuadros medios” y “dirigentes”, aparecieron verdaderos “engendros políticos, de todos los partidos”. Por ello, las dirigencias quedaron ocupadas por militantes no de Morena, sino por “ex” del Verde, PT, PES, PAN y PRI: David Monsreal y Mario Delgado, “dueños de la franquicia”, perdón ex líderes de esos partidos, son quienes controlan a diputados y senadores morenistas para aprobar y negociar leyes y acuerdos en beneficio de los grandes empresarios (“derecha”).

Monsreal y Delgado, utilizando las estructuras de militantes de Morena, o pasando sobre ellas como en Yucatán, han estado imponiendo candidatos que no lo representan. Aquí, cuando llegó el empleado de ellos, Ovidio Peralta, fue no para amarrar acuerdos con la dirigencia estatal, sino para hacer a un lado la estructura política en el estado y acordar con dirigentes del PRI la imposición de gente de ese partido con “imagen”, pero antecedentes nefastos.

Ovidio Peralta haciéndola del traidor del socialismo en Yucatán: “Gualberto Carrillo Puerto”, hermano-delator de Felipe y otros tres hermanos, asesinados por los hacendados yucatecos.

Del mismo modo, el “politólogo” Gibrán Ramírez fue enviado por Monsreal a Yucatán para “acallar” posibles protestas en la prensa, pues apenas llegó toda la “banda de periodistas culturales” -atrincheradas en el único diario que posee sección Cultural, donde especialistas en arte manteníamos un excelente nivel, y también nos dábamos el lujo de “hacer crítica” en contra de “lo políticamente correcto”- “desapareció del mapa”.

Especialistas en teatro, danza, literatura, música sinfónica, cultura maya, historia, urbanismo, cine, fotografía, cultura urbana, lingüística, durante más de 30 años alimentamos la imaginación y creatividad de lectores del Por Esto!, así como la crítica política, hasta que llegó un cavernícola llamado Gibrán, que nos corrió a todos. Luego, convirtió la sección de “cultura” en una sucursal “china” de Televisa, de la peor calidad. De pronto, el pensamiento social crítico de los últimos 30 años, alrededor de la sección cultural del Por Esto!, se fue por el tubo de desagüe. Y fue por la llegada de este “pelaná”: maleducado, descortés, autoritario. Después de un mes de no publicarnos y de ignorarnos, nos envió un correo donde nos notificaba de “su nuevo cargo como coordinador cultural del diario para enviarle nuestros trabajos”. ¡Por supuesto, nadie le hizo caso! Al mes, volvió a convocar a “nuevos escritores”, ahora pagando ¡mil pesotes! por nota para el Unicornio semanal.

¡De nuevo, nadie le hizo caso! “Cártel político secuestró a Morena”, de Roberto López Méndez, está circulando gratis en la red. Consígalo y léalo, porque como dijo Jesucristo: ¡La verdad os hará libres!