“He escuchado un anuncio en la radio que dice que nuestra sociedad ha evolucionado y se ha desarrollado, y por eso los diputados y senadores están trabajando en el derecho al aborto, aunque la manera como lo hacen desde mi punto de vista es muy penosa”, dijo el obispo auxiliar de la arquidiócesis de Yucatán, Pedro Díaz Mena.

En la acostumbrada misa que oficia los viernes al mediodía en la iglesia de Itzimná, el prelado yucateco –oriundo de Colonia Yucatán, comisaría del municipio de Tizimín–, se permitió usar un poco de ironía al abordar el asunto cada vez más extendido de las causas que defienden las feministas extremas del país, principalmente el “derecho” –así lo consideran ellas– de interrumpir su embarazo con cada vez más avance del tiempo, a pesar de señalamientos como el que dice que el feto que llevan no es parte de su cuerpo, y que lo que cometen en realidad es un homicidio, con agravantes.

–Y dicen que qué bueno que ya nos hemos modernizado, promoviendo al aborto –añadió Mena Díaz, brazo derecho del arzobispo Gustavo Rodríguez Vega–. Si nos damos cuenta, hermanos, nos estamos volviendo insensibles ante este tipo de leyes, que permiten por ejemplo que un menor pueda elegir su sexo desde los 12 años: con eso sólo nos están haciendo insensibles al valor de la persona, por lo que el efecto es que cada vez va a haber una sociedad con menos respeto de unos a otros. Por eso nosotros, a la luz de la palabra de Dios, debemos estar a favor de aceptar y difundir los auténticos valores humanos, que no tienen caducidad, ni se trata de ser modernos.

Mons. Mena Díaz centró su homilía en los crecientes efectos negativos que generan los movimientos feministas en muchas partes del país. Recordó las acciones que la Iglesia Católica ha realizado para defender a la mujer y a la vida, y se refirió a las decisiones que sobre esos temas están tomando instituciones del rango de la Suprema Corte de Justicia y las cámaras federales de diputados y senadores, ante lo cual no estamos “para sentarnos a lamentar lo que está pasando en México, sino ante todo son una prueba para nuestra fe”.

Mons. Mena Díaz abordó el tema de las crecientes manifestaciones feministas unos días antes de que se realicen (el próximo viernes 29) en la Ciudad de México quemas de actas o fes de bautismo, en protesta contra las limitaciones, censuras y represiones que se ejercen sobre ellas por defender sus “derechos”, incluyendo el del aborto.

Asimismo, se está convocando a una manifestación varonil este viernes 29 en varias ciudades, incluyendo Mérida, donde el evento empezará a las 7 pm en la Plaza Grande, para reivindicar que “los varones son los protectores más grandes de la vida indefensa, de la mujer y de la familia. México requiere el servicio de varones santos que sirvan a los planes de Dios”. El problema luce complicado y difícil de resolver.