¿Parlamento abierto?
José Luis Ripoll Gómez: ¿Parlamento abierto?.
Las leyes son como las salchichas. Duermes
mucho mejor cuanto menos sepas cómo se hacen.
Otto von Bismark.
Dice el artículo 40 de la Constitución política federal que somos una república representativa. Es decir, contamos con representantes para participar en nuestra vida política nacional. En aras de una supuesta democracia más “ciudadana” y ante la desilusión en los partidos políticos se ha propuesto una forma de democracia “más participativa”.
Dice el artículo 10 quáter de la Ley del Poder Legislativo de Yucatán que el Congreso local debe poner a consulta de la ciudadanía las iniciativas y proposiciones que se presenten y establecer una comunicación real y efectiva con los ciudadanos. Pomposamente la propia ley de referencia sostiene que los principios que promueven el parlamento abierto son enunciativos, no limitativos, lo que significa que toda idea que abone a un congreso más plural es bienvenida. Letra muerta.
En los últimos meses se ha mencionado que en Yucatán tenemos un “parlamento abierto”. Yo te pregunto lector, ¿te invitaron a analizar la recién reforma al poder judicial de Yucatán?, ¿han invitado a las asociaciones o los grupos de la sociedad civil organizada a discutir y debatir libremente las reformas que se han llevado a cabo en los últimos meses? Sólo a ciertos grupos afines, para darle un ropaje de “parlamento abierto”. Los que suelen acudir a socializar algún tema al Congreso son en términos generales, afines al poder. ¿Existe parlamento abierto? En el momento que se aprueba una reforma judicial en fast track, avasallando la autonomía del poder judicial local, jubilando o despidiendo a magistrados bajo el pretexto que el Ejecutivo debe poner a sus magistrados, tal como lo hicieron los gobiernos del pasado, en busca de una poder judicial a modo.
¿Hay parlamento abierto? Cuando impera opacidad en casi todos los temas que se plantean en las comisiones legislativas y en el pleno.
¿Tenemos parlamento abierto? Mientras una asociación civil tiene que promover amparo para que le responda el Congreso sobre una petición.
¿Contamos los yucatecos con parlamento abierto? Aunque sólo invitan a dialogar a unos cuantos muy incondicionales del sistema. Se trata de simular la participación de la sociedad civil.
Se dice que poseemos un parlamento abierto, cuando una abrumadora mayoría trabaja a la vieja usanza, aprobando ipso facto todo proyecto cuyo origen es el ejecutivo. ¡Ay de aquel diputado que se atreva a votar en contra de un proyecto del Gobernador! En la mayoría de las entidades federativas, donde la mayoría de los diputados locales son del mismo partido del Gobernador (Yucatán), los congresos trabajan como dependencias de la administración pública estatal, es decir, el jefe es el ejecutivo.
¿Cuánto es el porcentaje de iniciativas provenientes del Ejecutivo que son aprobadas? ¿Qué porcentajes de iniciativas aprobadas provienen de los diputados?
Muchos yucatecos pensamos que se habían terminado “los carros completos” de la antigüedad, empero en el Congreso estatal actual se aprueba todo proyecto enviado por el Gobernador sin cambio de ninguna coma. ¿A esto le llaman parlamento abierto?
Ojala algún día contemos con un real parlamento abierto. Entonces habremos dado un paso hacia una democracia más efectiva.