Amor propio... amor mío
El poder de la pluma
El amor que podamos darle a alguien siempre estará ligado a la cantidad y calidad de amor que nos tengamos a nosotros mismos. Por esto es necesario que aprendamos a valorarnos por lo que somos en nuestra esencia y no por lo que digan los demás, o incluso, porque hagamos lo que está de moda. Debemos aceptarnos como somos y entender que cada individuo es un ente distinto que piensa y actúa de manera diferente a la nuestra. Habrá gente que nos rechace y otra que nos acepte, pero, de inicio, no podemos, ni debemos fijarnos en las demás personas, sino en nosotros mismos.
Aquí cinco cosas que debes hacer para tener amor propio:
1.- Aceptar tu esencia.- Ésta es la que te rige desde tu nacimiento y en la forma que fuiste criado. Adiciona tu formación en la calle, más tus eventos y creencias y obtendrás la persona que realmente eres dentro de ti. Solo acéptate como eres y deja que lo demás fluya. Algunas personas te rechazarán por la misma causa que otras te amarán.
2.- Aprende del pasado.- Los errores cometidos en el pasado solo deben servirnos para aprender y no para tirarnos en cara nuestros fracasos. Después de haber aprendido de ellos, ahora sí olvídalos y cambia la página, si no los arrastrarás por la vida y no te permitirán crecer y valorarte.
3.- Pelea por tus sueños.- No sabemos si lograrás cumplirlos, pero te garantizo que el paso más importante ya lo diste al iniciar tu carrera para lograrlo. Que de ti no quede hacer lo que amas y anhelas más que nadie en el mundo. Es tu sueño, ve por él y que nadie te detenga.
4.- Agradece lo que tienes.- Poco o mucho, nada o casi todo, hoy considérate bendito por tener lo que tienes, material y espiritual. Uno no está peleado con el otro, de facto son la balanza perfecta, no la inclines demasiado para un lado. El agradecimiento es parte esencial de nuestro crecimiento.
5.- Eres único.- Jamás te compares con nadie, tu historia es muy distinta a la de los demás, tú caminaste por tu cuenta, con ayuda en ocasiones y otras tú solo, pero, al final, tú tejiste lo que hoy es tu experiencia de vida. Las cosas que logras son tuyas y eso nadie te lo puede quitar. Nadie es mejor o peor, solo diferente.
Recuerda que el amor propio es una decisión tuya y de nadie más. Tú eres quien le da valor a tu vida misma, tanto como a ti; no dejes que nadie te convenza de lo contrario. Las modas pasan, tu legado quedará ahí para la eternidad. Llorar se vale, rendirse jamás. Así es que paso a paso y te sentirás mejor día tras día.