Bloqueo... resultado de los miedos
El Poder de la pluma
Todos a través del tiempo y de nuestras vidas pasamos por momentos difíciles, pero, en algunas ocasiones, estas dificultades se convierten en miedo y esto nos termina paralizando.
Podríamos catalogar al miedo como el principal factor por el que muchas personas no cumplen sus sueños y no llegan a realizarse como tales.
El miedo también es un promotor de permanecer estáticos en una zona de confort estancada y llena de mediocridad que impera en nuestra vida por el resto de ella.
Ahora bien, el proceso es muy simple, pero nos empeñamos en seguir poniendo nosotros mismos los obstáculos necesarios para no poder pasar la barrera y vencer nuestros miedos.
Aquí cinco obstáculos que presentamos y que ayudan para fortalecer el miedo:
1.- Pensamientos negativos.- La forma en la que pensamos es el primer obstáculo al que nos enfrentamos de inicio, pues es lo primero que nos viene a la mente antes de realizar cualquier cosa. Desde el momento de la concepción del objetivo o la meta por cumplir, ponemos la primera piedra en el camino para poder iniciar el proceso y así llegar a buen destino.
2.- Palabras emitidas en negación.- Al momento de emitir en voz alta nuestra preocupación por aquello que creemos será difícil de cumplir, sea por falta de capacidad o por falta de tiempo, simplemente abrimos el portal de lo que NO va a suceder de antemano, gracias a nuestra intervención mental, y ahora de palabras emitidas por nosotros mismos.
3.- Falta de acción.- Podré pensar y decir lo que sea, pero si me quedo estático sin hacer nada, muy probablemente tampoco logre absolutamente nada. Podemos fracasar en la acción, pero si no lo intentamos, jamás sabremos lo que hubiera sucedido al respecto. Y no hay nada peor que quedarse con esa duda por el resto de la vida.
4.- Descuido físico y espiritual.- Cuando no le ponemos atención a nuestro cuerpo en todos los sentidos, no le ayudamos a proporcionarnos la seguridad necesaria para actuar con autoridad y sin importar el resultado de cualquier acción que realicemos. Es primordial, tanto en la parte física como en la espiritual, estar fuertes y saludables en todo momento.
5.- Falta de atrevimiento.- Al final, el último paso es el que será un parteaguas en tu vida. ¿Te atreviste a hacerlo o lo dejaste pasar? Después de ese acontecimiento nada será igual en tu vida, pero, si ya pasó una o más veces, no permitas que vuelva a suceder.
Sé valiente y haz que suceda, recuerda que siempre será peor el arrepentimiento de no haberlo intentado que la tristeza de haber fallado.