Desarrollando... ando
El poder de la pluma
Si estamos pensando cómo solucionar muchos de los problemas que tenemos en nuestra sociedad, deberíamos empezar por recomendar a las escuelas que agreguen materias que podrían ayudar a crear mejores profesionistas, e incluso mejores personas. Y no es que los programas estén mal o incompletos, sino que la sugerencia es reforzar lo que ya hay con materias que le permitan al estudiante salir más fortalecido y preparado para poder sobrevivir en el entorno negativo en que se podría mover. Tomando en cuenta que estamos rodeados en este momento de un entorno muy negativo y de confrontación, sería muy bueno ir preparando personas más positivas, que, en vez de hablar, se dediquen a actuar.
Aquí cinco materias que deberían enseñar en la escuela:
1.- Finanzas personales.- Si no sabes manejar el dinero, la economía y las finanzas de tu vida, imagina la de un negocio, propio o ajeno. No solo se trata de cómo hacer dinero, sino también de cómo manejarlo, protegerlo, invertirlo, gastarlo. La importancia de convertirlo en un patrimonio para tu futuro debe ser básica para salir a la calle.
2.- Estrategias de ventas.- Podrás saber mucho de tu producto o servicio, incluso de tu especialidad, pero si no sabes vender o venderte, no llegarás muy lejos. Empecemos con las estrategias para poder conocer las herramientas que tengo para llegar a mi mercado y así poder convencerlo, para luego cerrar con un taller que te haga practicar lo aprendido.
3.- Oratoria.- Podemos buscar otra forma de llamarla o cambiarle el nombre, pero hablar en público se ha convertido en algo que ha traspuesto fronteras, pues no solo las redes sociales han ayudado a eso, sino también en cualquier momento alguien nos llama y nos dice que tenemos que hacer una presentación de nuestro producto o servicio y debemos estar listos para ello.
4.- Inteligencia emocional.- No porque esté de moda, sino porque es fundamental para poder sobrevivir en el mundo que tenemos hoy alrededor. El entorno se vuelve más pesado y debemos estar preparados para poder contrarrestar los impulsos negativos de lo que leemos diariamente o vemos en la calle. El control de nuestras emociones juega un papel muy importante.
5.- Inteligencia social.- Después de poder y saber controlar nuestras emociones, ahora nos toca ser empáticos con los demás. Hay que trabajar la paciencia y la tolerancia, pero jamás lo lograremos si primero no entendemos cómo funciona la sociedad. Con esto evitaremos muchos conflictos.