Tu actitud… tu decisión
Juan Manuel González Ponce: Tu actitud… tu decisión
Si bien le dedicamos tiempo a platicar en artículos pasados a la actitud y sus benevolencias, en esta ocasión veremos como también nuestra actitud no depende de otras personas, sino de nosotros mismos. Estar bien en lo personal es preciso y necesario para estar bien en lo profesional. Si partimos de la base de que toda buena actitud siempre facilitará las cosas, también en el ámbito profesional resulta lo mismo. Tu actitud en el trabajo libera las tensiones o logra que se acumulen. Pero algo sí te tengo que dejar en claro, que la actitud que tú tengas, depende única y exclusivamente de ti. Así es que no te desgastes tirándole la culpa a otros. Aquí te menciono 5 actitudes que convierten tu trabajo en monótono:
1. Limítate a lo que te pidan: No hagas más de lo que debes hacer, solo haz lo que te pidan tus clientes o tus superiores. No des más de ti, solo resuelve lo suficiente como para cumplir con tus labores y poder seguir sobreviviendo tu día a día en el trabajo. No le hagas favores a nadie y solo preocúpate por ti.
2. No pongas atención a tu alrededor: Ignora lo que pasa en el entorno de tu trabajo, que nada te importe ni te logre sacar de tu zona de confort. Donde estás es perfecto, salirse de ahí significa hacer más de lo que esperan de ti, así es que no te arriesgues. Baja la cabeza y solo mira tú escritorio o lugar de trabajo cualquiera que éste sea.
3. Trabaja sin parar: Trabaja sin descanso, no hagas tiempos libres para despejarte o estirarte, simplemente dedícate a sacar lo que te indicaron o lo que necesitas y ya. Si despejas tu mente pudieras distraerte y le quitas la monotonía a tu trabajo, por lo que limítate a seguir trabajando, incluyendo tus días de descanso.
4. Se introvertido: Dedícate a lo tuyo y no colabores con nadie, limítate a convivir lo mínimo posible con tus compañeros y quédate solo el mayor tiempo posible. No participes en las juntas del trabajo, no opines, no respondas, aunque te pregunten, no señales, nada de nada. Te darás cuenta como cada día que pasa estarás más encerrado en tu burbuja.
5. No compartas, ni convivas con los demás: No compartas información con tus compañeros, ni convivas con ellos fuera del lugar de trabajo. No tengas relaciones informales con ellos ni asistas a sus compromisos, aunque te inviten de manera formal. No platiques en los baños, ni en la cocina o cafetería con tus compañeros, pues pudieras lograr relaciones informales que te distraigan de tu ámbito laboral.