Entre traiciones y tomas de protesta
El poder de la pluma
El primer día de este mes se inició con sentimientos encontrados: por una parte, la felicidad de quienes ganaron la elección que se veía culminada al ser nombrado Mauricio Vila Dosal gobernador constitucional de Yucatán y, por otro lado, los rostros de tristeza de quienes veían por la tele los lugares que podrían estar ocupando. Un día más para marcar en la historia política de Yucatán, donde la alternancia de partidos suma un número más a la estadística, pero que llega en una situación muy diferente a la del 2000, cuando Acción Nacional era amo absoluto, porque en Yucatán contaba con el gobierno municipal de Mérida, el estatal y el federal; hoy la cosa es distinta, porque el tsunami que ocasionó la figura del Peje barrió con todo, incluso ganaron candidatos que ni campaña hicieron, pero fueron beneficiados por el fervor por un personaje que les causa esperanza.
Hoy, a días de la toma de posesión, empiezan a salir publicaciones en las redes acusando y señalando a más de dos como los culpables de la derrota; bien dice el dicho: “Muerto el rey, viva Subway”, pero todas estas traiciones de las que se habla ¿cuánto de cierto tienen? El que esté libre de pecado dé el primer apoyo a un candidato de otro partido. Es un secreto a voces que la elección estuvo plagada de traiciones y anomalías que provocaron algunas paradojas en las estadísticas. Pero yo preguntaría: ¿cuánta gente de la que hoy señala salió a defender a su presidente de la República o a su gobernador cuando eran atacados en el Facebook? Es muy fácil echar culpas, pero habría que ser objetivos y analizar todos los priistas cuánto de porcentaje les corresponde de la derrota, cuántas veces defendieron o metieron el pecho por su partido. ¿O solamente se acordaban de que eran priistas a la hora de cobrar sus quincenas? Así hay muchos, pero muchos que hoy critican sin ver su cola. No les queda de otra que hacer una verdadera renovación, y cambiar lo que no sirve y a los que no sirven y solo afectan. Por su bien, ojalá el cambio no sea una simulación como muchas cosas de la elección.
Por lo pronto, arranca bien el nuevo gobernador, con acciones y un gabinete que da esperanza de que Yucatán siga creciendo, masinó.